Guadalajara, Jalisco.
Luego de once años de servicio, era tiempo de retirarse. Y más aún si consideramos que en la vida de un perro esto equivale aproximadamente a 60 años de edad. Y en todo ese tiempo, Drako, un valiente Pastor Belga, se caracterizó por su valentía y salvó muchas vidas, afirmó Juan Bosco Agustín Pacheco Medrano, secretario de Seguridad de Jalisco.
"Tenemos que destacar que llevó esos conocimientos a la práctica en múltiples aseguramientos de droga, en rescate de personas. La última y más reconocida de ellas, en el temblor de la Ciudad de México, donde al igual que todos nosotros, el hecho de haber localizado a una persona le da la felicidad a sus familiares de haber tenido la dicha de contar con su familiar extraviado durante el terremoto, ya sea en vida, incluso muerto, para rendirle los honores correspondientes".
El día elegido para el retiro del intrépido can fue precisamente en el marco de la conmemoración por el Día Internacional del Perro. Las autoridades le quitaron a Drako el chaleco distintivo como símbolo de su despedida de la corporación.
Drako comenzó su carrera policial en el año 2009, cuando se incorporó al Escuadrón Canino K9. No fue fácil, tuvo que ser sometido a varias pruebas, pero siempre se destacó por su fortaleza, velocidad, su valentía y sobre todo su ingenio.
Ya como perro policía, Drako se especializó en la búsqueda de narcóticos, labor con la que logró grandes decomisos. En el año 2012, fue entrenado para localizar personas y se recuerdan sus rescates en municipios como Tonalá, Tlajomulco de Zúñiga, La Barca, San Juan de los Lagos, Guadalajara, Puerto Vallarta y Zapopan, entre otros.
En 2017 terminó de cimentar su leyenda como héroe al participar en la búsqueda de personas tras el sismo del 19 de septiembre en la Ciudad de México, tal y como lo relatan su entrenador Santos Jiménez y su binomio el oficial Eudoro Zúñiga.
"Y me alegra mucho, me siento orgulloso, que llegó ahí y es entrenado por nosotros en Jalisco, en la unidad canina del estado", dijó Jiménez.
"Hoy se ha ganado ya el merecido descanso de ya no salir e ir a trabajar. Donde sea que esté lo seguiré atendiendo y lo seguiré viendo", concluyó Zúñiga.
Incansable, como suele ser, Drako ya tiene en su horizonte otra tarea por el bien de los ciudadanos de Jalisco: ahora como profesor se dedicará a entrenar a otros perros policías de su raza, quienes seguro aprenderán mucho de este auténtico héroe de cuatro patas.
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