Sídney, Australia.
Al menos diez ministros australianos presentaron su dimisión, indicaron este miércoles medios de comunicación, un nuevo revés para el primer ministro Malcolm Turnbull, que podría tener que enfrentarse a un nuevo intento de derrocarle dentro de su propio partido.
La disputa interna salió a la luz el lunes, cuando el primer ministro se vio obligado, falto de apoyos en sus propias filas, a renunciar al proyecto de incluir en la ley australiana el objetivo en materia de reducción de gases con efecto invernadero.
Tras una semana de contestaciones, Turnbull, de centro-derecha, decidió el martes declarar su puesto vacante, lo que llevó a una votación interna en su formación, el Partido Liberal, en la que salvó su puesto por los pelos.
En la votación, Turnbull obtuvo 48 votos a favor, superando a su ministro de Interior, Peter Dutton, que recabó 35 y terminó dimitiendo.
Aún así, la posición del jefe de gobierno, cuyo partido está por detrás de la oposición en los sondeos a un año de las elecciones, quedó debilitada.
Además, al menos otros nueve ministros presentaron también su dimisión, informaron el miércoles las cadenas ABC y Sky News.
Sin embargo, Turnbull solo aceptó dos renuncias, la de Dutton y la de su ministra de Desarrollo Internacional, Concetta Fierravanti-Wells.
El miércoles afirmó que los otros ministros le "aseguraron inequívocamente su lealtad y su apoyo".
Dutton, al que muchos consideran más conservador que el primer ministro, gestionaba el ministerio encargado de la policía, la inmigración y los servicios de inteligencia.