La Haya, Holanda.

Los daños causados en la isla franco-holandesa de San Martín por el huracán Irma son "enormes", declaró el ministro de Interior de Holanda este miércoles.

"Los daños son enormes, hasta tal punto que todavía no podemos mensurarlos", afirmó ante los medios holandeses Ronald Plasterk, encargado de coordinar las operaciones en nombre del Gobierno de Holanda.

A causa de las "dificultades en la comunicación" con la isla, es "imposible por ahora tener una visión completa de la situación", agregó el ministro.

Un poco más tarde, el primer ministro holandés, Mark Rutte, dijo que las primeras "informaciones e imágenes" procedentes de la parte holandesa de la isla caribeña, arrasada por el paso de Irma, eran "terribles".

Además, anunció que desde el momento en que las condiciones meteorológicas lo permitieran, Holanda enviaría dos navíos de la Marina desde Curaçao y Aruba con militares y bienes humanitarios a San Martín, donde ya se encontraban un centenar de soldados.

En un mensaje publicado en Facebook, el rey Guillermo Alejandro y la reina Máxima de Holanda se dirigieron a los habitantes de San Martín, San Eustaquio y Saba, "golpeados por una violencia natural devastadora".

"Todas las víctimas del huracán están en nuestros corazones", concluyeron.

Según informó el Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos, Irma se desplaza hacia el oeste-noroeste a una velocidad de 26 km/h, con vientos de hasta 295 km/h. Tras asolar San Bartolomé y San Martín tomó rumbo hacia Puerto Rico y Haití.