Guadalajara, Jalisco.

A una semana de la granizada, los vecinos de la colonia Rancho Blanco continúan con las labores de limpieza de sus viviendas, negocios y vehículos.

En esta zona de la ciudad, el agua y el granizo superó el metro y medio de altura y se metió literalmente hasta la cocina y las habitaciones.

El apoyo ha caído a cuenta a gotas, mientras los afectados cuantifican daños y secan enseres con la esperanza de que vuelvan a funcionar.

En la calle Río La Paz, el señor Gregorio Evangelista y su familia sacan de estantes de su papelería hojas, láminas y material didáctico que no puede ser rescatado.

El señor Evangelista estimó que las perfidias en su vivienda y negocio ascienden a 500 mil pesos y la ayuda no ha llegado. Es el mismo caso de la señora, Griselda Ruvalcaba, cuya vivienda presenta daños estructurales por la humedad y el peso del granizo que soportó el techo.

El apoyo que ha canalizado el Ayuntamiento de Guadalajara a algunos vecinos de Rancho Blanco consiste en 10 mil pesos, cantidad que es insuficiente para la magnitud de sus pérdidas, lamentó la señora, Alma Ruvalcaba, quien perdió menaje de casa y un vehículo.

La colonia Rancho Blanco se encuentra en los linderos de los municipios de Guadalajara y Tlaquepaque, lo que ha dificultado administrativamente la entrega de ayuda. Para los vecinos ese argumento no es válido, porque a la hora del cobro del predial, no existe duda de que sus domicilios pertenecen al municipio de Guadalajara.