Guadalajara, Jalisco.

A un año de que el Congreso de Jalisco aprobó la Ley UBER, esta ha quedado solo en letra muerta.

Las empresas de redes de transporte no han pagado un solo centavo del impuesto que el Gobierno del Estado debería aplicarles, con lo que han dejado de ingresar a las arcas 100 millones de pesos, denunció el diputado local Alejandro Hermosillo.

Dijo que a esto se suma que el servicio ha empeorado. Los vehículos de UBER ya no cumplen el requisito de cinco años de antigüedad,  y se cobra una tarifa dinámica abusiva, y ya no se realiza de manera previa al usuario.

Tanto reina la anarquía en UBER, que invaden ciclovías y se estacionan en  doble fila. Además, de que se relajaron los filtros para elegir choferes. Y en otras empresas como Cabify, también hay anomalías, pues los conductores se quejan de que les adeudan dinero por bonos semanales que les prometieron para cambiarse a este plataforma.

Señaló que el ejecutivo no ha cobrado el impuesto del 1.5 por ciento por cada viaje porque no ha firmado el convenio de colaboración con las empresas de redes de transporte.

Hermosillo, urgió a que el Gobierno de Jalisco suscriba de forma inmediata ese convenio y que adecue  el reglamento de esta ley, el cual por cierto, violaba incluso la Ley de Movilidad, y que se concluya con el registro de conductores.

Se comprometió a que el Congreso Local ajustará lo que se tenga que ajustar, pero será imposible hacerlo si no se lleva a la práctica  a la ley.