Un investigador 100% formado en CULagos




Por Gabriela Arreola

Hace algunos años en México, la electrónica empezó a estar de moda, entonces ciertas universidades optaron por incluir en sus ofertas académicas carreras afines a esta ciencia. Fue el caso de la Universidad de Guadalajara, y en específico del Centro Universitario de los Lagos, en el que se abrió la carrera de mecatrónica. Esto atrajo al ahora doctor y académico Jesús Ricardo Sevilla Escoboza, quien a pesar de tener otras opciones decidió convertirse en estudiante del CULagos, es ese tiempo, campus del Centro Universitario de los Altos.

Un especialista formado en el CULagos

Desde Mazatlán, Sinaloa, el doctor ya contaba con formación técnica en electrónica. Él fue parte de las primeras generaciones que optaron por esas carreras innovadoras que se atrevían a fusionar varios campos del conocimiento, y fue uno de los pocos que decidieron continuar su formación única y exclusivamente en el CULagos.

“Empecé a formar parte de estas generaciones ambiciosas que buscaban estas nuevas áreas multidisciplinarias que empezaban a mostrar cómo la integración de diferentes campos puede dar un producto tal como lo es la mecatrónica, desde un punto de vista formas un mecánico, formas un electrónico, formas un informático”, comparte.

Desde siempre un entusiasta de la investigación

Afortunadamente en los tiempos de estudiante de Sevilla Escoboza, empezó a tomarse muy en serio en los entornos académicos la incorporación temprana a la investigación, así que tuvo la oportunidad de involucrarse con grupos de especialistas que se enfocaban en el desarrollo de aplicaciones electrónicas. Así nació su gusto por la investigación.

Acerca de sus trabajos, menciona lo siguiente:

“Soy de base electrónico, formado específicamente en mecatrónica, y con un posgrado en optoelectrónica. Estamos juntado los campos tanto de informática, electrónica y óptica; y al final me decidí por la base, sigo trabajando mi línea de investigación en electrónica. Ya en mi etapa como investigador me he enfocado en lo que se llama sincronización de sistemas complejos, ¿qué es esto? la sincronización es un fenómeno que se presenta en todas las áreas, es el ajuste de ritmos, una especie de coordinación, entonces lo que queremos hacer nosotros es entender cuál es el principio de la organización basada en la sincronización de algunos elementos”.

En la vida cotidiana los ejemplos de sincronización son muchos y se encuentran en diversas áreas y entornos, algunas muestras son los patrones que forman especies animales como las aves o las luciérnagas; el funcionamiento cerebral o una serie de producción industrial.

Sobre la docencia, el doctor menciona que hay un abanico amplio de estudiantes. Aunque  dice estar contento con las nuevas generaciones a las que instruye, pues como sus clases son avanzadas, esto le permite trabajar con los alumnos de una manera especial en la que se mezcla lo académico con la investigación.

“Al ser un curso especializante tienes la posibilidad de trabajar a nivel de proyectos, puedes explotar todo lo que ha hecho un estudiante aprendiendo las bases, cómo va a llegar y ser una materia integradora de varias áreas. La idea es esa, tenemos que empezar a cultivar el emprendimiento, sin el emprendimiento no vamos a avanzar como país, pero para que un estudiante sea capaz de emprender necesita bases muy sólidas, bases que este tipo de laboratorios les puede dar”.

Una de las ventajas de los estudiantes del CULagos, agrega el doctor, es que son formados por investigadores y especialistas que despiertan en ellos el sentido de la autogestión del aprendizaje. Además, Sevilla Escoboza señala que los egresados tienen que ser esa amalgama que una al sector productivo con el campo de la investigación y de la generación de conocimiento.