Muralismo e historia: Se cumplen 74 años de la muerte de José Clemente Orozco
Fragmento de uno de los murales de José Clemente Orozco. Cortesía




Guadalajara, Jalisco.

Han pasado 74 años desde el fallecimiento de José Clemente Orozco, uno de los muralistas mexicanos más influyentes en la historia del país.

Aunque partió un 7 de septiembre de 1949, su obra, sus convicciones, su percepción de la clase trabajadora, los embates contra los que ha tenido que luchar la humanidad, y su idea de justicia y libertad, no han desaparecido.

Para el nacido en Zapotlán el Grande, Jalisco, el mural fue la forma más efectiva en la pintura para expresarse, pues no puede ocultarse ante la visión de la gente, y es para todos.

Esa convicción, lo llevó a mostrar las formas en las que para él, estaba estructurado el mundo, y aquello que debía suceder, en un sentido humanístico.

En Jalisco, su obra mural ocupa los lugares de la capital, pues en Guadalajara, es posible apreciar los frescos que ocupan algunos de los edificios más importantes.

Conozcamos algunos de ellos

Por Plaza Tapatía, hay que hacer una caminata recta para toparse con el Museo Cabañas, lugar que en algún momento fungió como centro para la caridad, y que incluso fue un cuartel en la Guerra de Independencia.

Ahí, se mantiene vivo el recuerdo de Orozco, con los 57 frescos que dejó plasmados en el interior de la Capilla Mayor.

Fue entre 1937 y 1939 que realizó sus obras en este edificio, y entre ellas, destaca en la cúpula abovedada ‘El hombre en llamas’, hoy, uno de los motivos por los cuales el inmueble es patrimonio Mundial por la UNESCO.

Muralismo e historia: Se cumplen 74 años de la muerte de José Clemente Orozco

‘El hombre en llamas’. Cortespia

Sofía Anaya Wittman, académica de la Universidad de Guadalajara, en su tesis explica que se trata del mito griego de Prometeo, quien robó el fuego del olimpo para entregarlo a la humanidad, para que pudieran desarrollarse en las ciencias, el lenguaje, la navegación, y las artes.

Esto enfureció a Zeus, por lo que castigó a Prometeo con sufrir los dolores de que un águila comiera de su hígado por el resto de los días.

En torno a este mural, el resto de frescos complementan con simbolismos nacionales, acerca de la conquista de México, el desarrollo del país y las comunidades indígenas.

Frente a la Plaza de Armas, se encuentra el Palacio de Gobierno, y basta con entrar para darse cuenta de lo que se encuentra en uno de los muros al fondo: Miguel Hidalgo y Costilla, portando una antorcha en representación de la lucha independentista que liberó a México de la corona española. 

Tal es la estructuración de la obra, que conforme hay un acercamiento al subir las escaleras, pareciera que el héroe patrio se abalanza sobre quien lo ve, un ejemplo de cómo José Clemente Orozco manipulaba el espacio, y lograba la imposición de sus obras ante el ojo humano.

  • Con ese fondo rojizo, y los grupos de personas que se encuentran en disputa en la parte baja del mural, se dan los diversos detalles que evocan a la lucha, a la búsqueda de la libertad, y al liderazgo de Miguel Hidalgo.

Otro de los lugares donde hay una fuerte crítica social, es el Paraninfo Enrique Díaz de León, en el hoy Museo de las Artes (MUSA).

En esta zona, aparecen dos murales, realizados entre 1935 y 1937. Uno es ‘El hombre creador y rebelde’, en la cúpula del edificio.

Es en él donde sus elementos construyen ideas de progreso, y es por ello que plasmó cuatro figuras humanas. Aparece el ‘Hombre pentafásico o científico’, quien porta herramientas como un escalímetro y un compás.

Muralismo e historia: Se cumplen 74 años de la muerte de José Clemente Orozco

Murales en el Paraninfo Enrique Díaz de León. Cortesía

El Obrero’, una figura masculina fuerte que maneja la creación y la ciencia; ‘El rebelde’, donde este hombre aparece cayendo, y tiene una horca en el cuello, y que se encuentra sujeto a ‘El Maestro’, aquel que busca incentivar el conocimiento, como medio de liberación.

El otro es ‘El pueblo y sus falsos líderes’, en el estrado del Paraninfo, que es muestra de un levantamiento social, en contra de aquellos “falsos líderes”, que buscan contraponerse a las intenciones de un pueblo devastado, “la masa”, con carencias y necesidades, y con una apariencia esquelética.

  • Este mural está compuesto por tres paneles. 

Estas, son algunas de las obras que José Clemente Orozco pintó en México y en Estados Unidos, y gracias a su talento, es que otros importantes recintos, como en Ciudad de México, el edificio de Bellas Artes, o el de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), mantienen su relevancia artística y cultural.