Argentina pasa con creces la prueba del Messi ausente
Selección argentina. Foto: AFP




Buenos Aires, Argentina.

Dos victorias en la primera doble fecha le permitieron a la selección argentina sellar un arranque ideal en las clasificatorias sudamericanas al Mundial de 2026 y demostrar que puede jugar sin Lionel Messi, como lo hizo el martes en la goleada 3-0 a Bolivia en La Paz.

Tiene razones para sentirse "contento" el entrenador Lionel Scaloni: el equipo campeón del mundo dio muestras claras que no baja la guardia y, por el contrario, exhibe un apetito voraz por mantener el protagonismo, nueve meses después de la histórica consagración en Catar-2022.

La Albiceleste firmó un comienzo perfecto en el premundial, con un triunfo ajustado pero muy merecido sobre un duro Ecuador (1-0), al que no le alcanzó su orden y empeño para impedir una obra maestra de Messi, y luego con un rotundo 3-0 sobre Bolivia en el estadio Hernando Siles, a 3.600 metros de altitud.

  • Messi, que había sustituido ante Ecuador minutos antes del final, viajó con la selección argentina a Bolivia pero ni siquiera integró el plantel, aun cuando permaneció junto a sus compañeros en el banco de suplentes del Hernado Siles.

"No estaba para jugar" 

"Leo no estaba para jugar. Intentó recuperarse y no se sentía cómodo. No lo arriesgamos. No era necesario porque vienen cosas importantes", dijo Scaloni sobre la ausencia de Messi, que venía de disputar 12 partidos en 49 días, 11 de ellos en Inter Miami, su nuevo club en la liga estadounidense.

"Estamos contentos. Era una parada muy difícil y la sacamos adelante. La fórmula son los jugadores, que hicieron un partido increíble. La virtud del equipo es querer jugar, no tener miedo a jugar con la pelota. Sin ellos sería imposible", elogió el DT a sus dirigidos, intratables en la altura de La Paz.

Ausente Messi, el timón lo tomó Ángel Di María, veloz y ultraliviano en el altiplano, incontrolable para una defensa rival que pronto se quedó con diez por la expulsión de Roberto Fernández, a los 38 minutos, un hándicap enorme ante una Argentina atenta y punzante en ataque.

"Hicimos un partido perfecto, no cometimos errores, no nos hicieron goles, trabajamos como lo habíamos preparado, y cada vez que llegamos convertimos, eso es importante. El equipo se merecía un triunfo así", destacó Di María.

Así, Argentina cerró la primera doble flecha de la clasificatoria con dos victorias, cuatro goles anotados, su arco en cero y barios sobresalientes en la libreta de calificaciones. Acaso, como único detalle por mejorar fue la sequía de los delanteros Lautaro Martínez y Julián Álvarez que no pudieron anotarse en el marcador.

Pero lo relevante es que Argentina supo encauzar y resolver sin problemas el desafío de jugar en la altura y sin su máxima figura, pero con lucidez para entender las claves del partido, una estructura firme más allá de las variantes, y recursos múltiples para destrabar cualquier situación.

Lo que sigue para la Albiceleste, líder del premundial junto a Brasil, serán los cruces en octubre en casa ante un Paraguay que empezó mal (un punto) y luego un viaje a Lima para visitar a Perú, otro rival que sumó poco.