Guadalajara, Jalisco.

A un año y cinco meses de la inauguración del Paseo Fray Antonio Alcalde, empleados de comercios y vecinos de la zona han visto un deterioro del mobiliario urbano, falta de alumbrado público en algunas zonas y poca vigilancia.

Óscar Hernández, quien transita cotidianamente por esta zona desde que era una avenida estrangulada por el transporte público, ha notado el descuido del andador.

“Yo lo que he visto es falta de vigilancia, a veces hay mucho indigente, en cuestión de limpieza también hace falta, mantenimiento”.

Sin embargo, reconoció que esta parte de la ciudad mejoró al convertirse en un paseo peatonal.

Al hacer un recorrido por el Paseo Fray Antonio Alcalde se pudo comprobar que las bancas están despostilladas y que hay daños en los bolardos que sirven para dividir la ciclopista o el arroyo vehicular de la zona peatonal.

Empleados de comercios señalaron que la falta de alumbrado es evidente entre la Avenida Juárez y la zona de los dos templos. Adriana Nájera evidenció principalmente la acumulación de basura y fallas en la luminaria de las fuentes.

El Paseo Fray Antonio Alcalde mide 2.5 kilómetros y fue diseñado para convertirse en un punto turístico de la ciudad.