Uvalde obligó a EEUU a enfrentar su problema con las armas en 2022
Fotografía cedida por el profesor de arte, Abel Ortiz Acosta, donde se muestra el mural que la artista Brittany Britt Johnson le dedicó a Nevaeh Alyssa Bravo, una de las 21 víctimas de la matanza en la Escuela Primaria Robb en Uvalde, Texas. EFE/ Brittany britt Johnson Abel Ortiz Acosta




Washington, Estados Unidos.

Estados Unidos, el único país del mundo con más armas de fuego en circulación que habitantes, volvió a vivir un año con centenares de tiroteos múltiples. Pero fue una matanza, la de Uvalde -19 niños y 2 adultos asesinados- la que empujó al Congreso a aprobar su ley de control más importante en 30 años.

El país se estremeció a finales de mayo cuando un joven de 18 años, armado con un fusil semiautomático que había comprado legalmente, entró en una escuela primaria de la localidad de Uvalde (Texas) y asesinó a 19 estudiantes y dos profesoras.

Fue la masacre escolar más sangrienta desde el tiroteo de Sandy Hook (Connecticut), en el que murieron 26 personas, y llegó apenas unos días después de que un supremacista blanco, también de 18 años, y también armado con un rifle semiautomático, matara a 10 personas en un supermercado de Búfalo (Nueva York).

Las tragedias de la primera mitad del año lograron lo que muchos legisladores progresistas del país llevaba décadas buscando: romper el bloqueo republicano a los proyectos para limitar el acceso a las armas de fuego.

Pero la acción legislativa no se limitó al Congreso: a lo largo de 2022, más de 20 estados aprobaron hasta 90 leyes para reforzar el control de las armas de fuego.