Recolectrón, el proyecto de la UdeG que da nueva vida a la basura tecnológica
Fotografía: AFP




Guadalajara, Jalisco.

En el marco del día del cambio climático, y ante la ocupación de este grave daño medioambiental, investigadoras de la UdeG encabezan el proyecto Recolectrón que consiste en el acopio de la basura tecnológica como teléfonos celulares, tabletas y cualquier dispositivo de esta índole. Graciela Domínguez, coordinadora de Sostenibilidad, encabeza esta iniciativa y aquí ofrece más detalles.

"Invitamos a la sociedad a participar en nuestra campaña de recolección de residuos tecnológicos, nuestro Recolectrón. Ya realizamos una primera etapa, en algunas sedes juntamos 7 toneladas de residuos y la semana próxima es el reto mayor, estaremos aquí en el edificio central con un punto de acopio que es una excelente opción para recibir el desecho tecnológico que todos tenemos en nuestra casa y aquí estamos para ayudarlo a que nos depositen".

Jalisco es el segundo mayor generador de basura tecnológica después de la Ciudad de México y el Estado de Baja California, con mil 256 kilotoneladas de residuos de tecnología. México, además, es el segundo mayor en América Latina.

Sandra Galán, integrante de esta coordinación, ejemplifica la cantidad de generación de residuos en el país:

"Para que se den una idea, con esta cantidad podríamos llenar dos veces el Estadio Akron que está aquí en Guadalajara, en la UdeG, como una institución sostenible, trabajamos para comprender y solucionar los problemas más acuciantes de la sociedad, como es este tema, la creciente demanda de aparatos electrónicos y, con ello, la generación que cada vez se problema se vuelve cada vez mayor".

El 65 por ciento de material puede reutilizarse, y es aquí donde radica la importancia de canalizarlo a lugares en donde se pueda renovar el ciclo de vida de estos objetos. Por ello, a partir del lunes 30 de mayo el edificio de Rectoría, ubicado en la Avenida Juárez, en la Colonia Americana, se convertirá en un centro de acopio

"Los cuales son sustancias orgánicas tóxicas, metales pesados y productos químicos que permanecen en el ambiente por largos periodos de tiempo y al no degradarse con facilidad se acumulan y causan daños a la salud y el medio ambiente. Los residuos electrónicos también contienen metales preciosos como oro cobre y níquel. De acuerdo con la unión nacional de telecomunicaciones, hay siete veces más oro en una tonelada de teléfonos inteligentes que en una tonelada de mineral de oro".


Iván De León Meléndrez