Guadalajara, Jalisco.

El gobernador Enrique Alfaro Ramírez sostiene que, después de año y medio de pandemia, Jalisco ya está preparado para el regreso a clases de manera presencial en el nivel de educación básica, y para ello ha tenido que invertir en una reforma educativa que va más allá de un texto lleno de buenas intenciones.

“Salinas, luego Zedillo, luego Fox, luego Calderón, luego Andrés Manuel… así todos, y todos hacen una reforma educativa, pero en este país las escuelas se siguen cayendo a pedazos; seguimos teniendo escuelas que no tienen ni siquiera una sombra para que los niños hagan sus actividades cívicas o físicas; las escuelas no tienen baños dignos, mucho menos internet ni computadoras. Entonces, la reforma en la que nosotros creemos no es una reforma de discurso ni de modificar leyes; es una reforma para dignificar el proceso educativo y esta es una obra que representa esto”.

Lo dijo durante una gira a planteles escolares donde incluyó el preescolar Héroes de Nacozari de la Colonia Ferrocarril; la secundaria Mixta 56 y la primaria Ramón Corona.

Enrique Alfaro aseguró que el daño a los niños, de año y medio lejos de las escuelas, está hecho y ahora hay que recuperar el tiempo.

“Porque estamos ya listos para este regreso a clases presenciales, durante estos dos años de Gobierno hemos intervenido alrededor de 600 escuelas de Jalisco, para hacer intervenciones de profundidad, para arreglar de a de veras las escuelas. No para maquillajes, sino para transformaciones de fondo, y ahora que estamos listos para el regreso a la presencialidad, para mí es muy importante hacer este recorrido para ver cómo quedaron las escuelas, para platicar con las maestras y con los maestros sobre qué falta, qué necesitamos, y todos váyanse poniendo de acuerdo con el secretario de Educación y conozcamos los protocolos que tenemos que seguir para que nuestros niños regresen con mayor seguridad a las aulas".

"Lo que yo estoy convencido, y sé que hay mucho de fondo de debate en ese sentido: la sociedad está dividida en la discusión sobre si hay que regresar, o no hay que regresar a clases; lo que yo digo y voy a sostener hasta el final, respetando el derecho de quien sea a disentir o no estar de acuerdo, es que a los niños ya se les hizo un daño terrible con un año y medio lejos de sus maestras y maestros, compañeros y de sus escuelas. El riesgo del virus va a seguir mucho tiempo todavía y tenemos que enseñarnos a convivir con ese riesgo y bajarle la peligrosidad al virus con las medidas básicas, que son el uso del cubrebocas, la distancia y la higiene”.

Las obras de ampliación de espacios, colocación de lonas y dignificación de baños, dijo, garantizan un regreso seguro a clases.