Puerto Vallarta, Jalisco. 

Debido a la contingencia por el coronavirus, Talpa de Allende vivió una Semana Santa desolada, sin peregrinos que atiborraran las calles y la catedral como lo hacen año con año, así lo confirmó el alcalde talpense, Martín Eduardo Guzmán Peña.

Y es que a pesar de que la actividad sobre todo la económica se ha detenido en casi un 90% en Talpa de Allende, los talpenses han cumplido a cabalidad las indicaciones sanitarias, asegura Guzmán Peña.

El alcalde espera que esta contingencia pase pronto para poder reactivar la vida pública y económica de la ciudad, sobre todo para que las personas vuelvan a sus trabajos, pues lamentó que el Municipio no cuenta con recursos para poder emprender una campaña masiva de apoyo, no obstante, se está buscando la manera de atender de manera particular a quienes así lo necesitan.

Redacción: Javier Frías