Guadalajara, Jalisco.

En el Estado de Jalisco existen más de cinco millones de personas en situación de pobreza y catalogadas como vulnerables de carencias. Según el Informe Anual sobre la Situación de Pobreza y Rezago Social 2018. En donde la suma de la población en pobreza, pobreza extrema y vulnerabilidad por carencias, dan un total de 66%.

El virtual ganador del gobierno, Enrique Alfaro, tendrá un panorama difícil de asumir. No sólo existe una crisis en términos de seguridad, sino también una brecha social por la cual queda mucho por hacer. Tan sólo en pobreza extrema existen 144 mil 881 personas, mismas que no cuentan con un ingreso básico o regular.

Aunque el grado de rezago social es catalogado como bajo para los jaliscienses, existen 1088 zonas de atención prioritaria, de las cuales 7 son rurales y 1081 urbanas.

Sí, Jalisco ha disminuido el nivel de pobreza en 52 municipios, pero 61 se han mantenido con las mismas cifras y 12 han aumentado. La comparativa con los demás estados de la República hace que los números no sean alarmantes, sin embargo, no quiere decir que no sean preocupantes.

Fotografía: Sonia López

La salud sigue siendo un tema latente para el estado del tequila y el mariachi. Con 17.6% de su población sin acceso a ella, es decir, más de un millón de personas sin derecho a una salud digna. A demás de contar con 39% de sus habitantes en pobreza monetaria oficial, según el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL).

La población que vive en situación de pobreza se concentra en 10 municipios. Particularmente en lo que respecta a la calidad y espacio en la vivienda. Los cuales son: El Salto, Guadalajara, Lagos de Moreno, Puerto Vallarta, Tepatitlán, Tlajomulco, Tlaquepaque, Tonalá, Zapopan y Zapotlán el Grande.

Municipios como El Salto y Puerto Vallarta padecen de hacinamiento (amontonamiento o acumulación de individuos en un mismo lugar), rebasando porcentajes del 10% de su población. Lagos de Moreno presenta problemas de instalación de drenaje igualando el 10%. Además de los recurrentes problemas de falta de acceso al agua potable en El Salto, Tlaquepaque y Tonalá.

Este es el Estado que le espera al futuro gobernador y estas son las cifras con las que tendrá que trabajar a partir de que comience su mandato.