Guadalajara, Jalisco.

El relleno sanitario de Los Laureles vive sus últimos días de operación. Esto, luego de la prórroga concedida por las autoridades municipales y el Gobierno estatal, en la que decidieron que, a partir del lunes 1 de noviembre, y tras más de 20 años de operación, deje de recibir las casi tres mil toneladas de basura diarias que son generadas en la Zona Metropolitana de Guadalajara.

Sin embargo, los pepenadores que laboran en este relleno sanitario esperan una resolución, ya que éste es su fuente única de ingresos.

Lo anterior es porque solicitaron que el juez sexto de distrito en materias Administrativas, Civil y de Trabajo resuelva el juicio de amparo que emitieron los abogados de los recolectores, para que por medio de una suspensión legal puedan seguir laborando.

Por lo pronto, el alcalde de Guadalajara, Pablo Lemus Navarro, ha señalado que no habrá vuelta atrás en la decisión, y a partir del 1 de noviembre, el relleno sanitario de Picachos será el nuevo receptor de toda la basura generada por los municipios de Guadalajara y Zapopan.