Ocotlán, Jalisco

Como medida para vigilar que los negocios esenciales que sigan abiertos durante el periodo de emergencia sanitaria cumplan con las disposiciones de higiene y sana distancia, el gobierno de Poncitlán capacitó a 20 servidores públicos de su nómina para que fungieran como inspectores de reglamentos, así lo dio a conocer el director de dicha dependencia Benito Barajas:

“Tenemos ahorita 20 personas más capacitadas para salir a la calle, a llevar los oficios y más que nada platicar, con los de los negocios, con las personas a las que se les estaba viniendo el turismo encima, pero creo que de mañana en adelante vamos a tener un poco más controlado”.

Con este personal extra, esperan poder controlar mejor los negocios, sobre todo los de venta de comida que el pasado fin de semana registraron una alta afluencia de clientes dado que Poncitlán fue el último municipio de la región en tomar acciones severas para mitigar la propagación del virus, ya que si bien habían hecho las recomendaciones, no cerraron espacios públicos.

Benito Barajas agregó que estas medidas las están implementando no para perjudicar o multar a los dueños de negocios, sino para mitigar la aglomeración de personas, y que sólo clausurarán a aquellos que sean reincidentes en una falta:

“Pues nosotros ahorita estamos tratando de no perjudicar a la gente porque usted sabe bien que si tiene su negocio cerrado y todavía tiene multa pues sí está preocupante. Igual se les está llamando la atención y la clausura es nada más para garantizar que esté cerrado”.

Respecto a la cuestión de las clausuras, el director de reglamentos puntualizó que sólo han llegado a este extremo con tres negocios, y que el sector de restaurantes y bares son con quienes más problemas han tenido.