La Ciénega llega al Día Mundial del Agua con estrés hídrico e incertidumbre en calidad del líquido
Foto: Juan Carlos Salcido




Ocotlán, Jalisco

Aún con la presencia del lago más grande de México y siendo el lugar en donde termina el Río Lerma y comienza el Santiago, la región Ciénega de Jalisco llega a este día mundial del agua con estrés hídrico, además de otras problemáticas como la contaminación de estas aguas y sin una medición exacta de la calidad del lago de Chapala.

Así lo consideran desde la Asociación Intermunicipal para la Protección del Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable del Lago de Chapala, Aipromades, y su director, Gabriel Vázquez Sánchez, quien explicó a que se refiere con estrés hídrico en una zona con tanta agua:

“El Lago de Chapala es una interface de un sistema hidrológico hemisférico mucho más grande, el cual viene acarreando problemas desde el alto Lerma, desde el altiplano. Cuando el agua llega al lago de Chapala, llega con el acarreo de vertimientos de cinco estados; ya llega aquí con toda una problemática acumulada”.

Prueba de dicho estrés son los pueblos de la ribera norte del lago, en donde los habitantes deben extraer agua potable de pozos profundos incluso viviendo al lado de esta fuente, los cuales además requieren tratamiento extra dado que algunos son termales.

Esta situación de estrés no sólo se ve en las aguas superficiales, si no que incluso ha llegado a las aguas profundas, así lo considera el activista ambiental Enrique Lira Coronado, quien dio luz a un grave incidente en una presa de Ayotlán, en la que una tequilera derramó sus aguas sin tratar. El ambientalista además, ha visto indicios de que los efectos llegaron a niveles más profundos:

“El acuífero que está abajo de Ayotlán, que recibió las aguas de esa tratadora, que no era tratadora, era una laguna que aventaba las vinazas al acuífero y esas vinazas están saliendo en La Barca, y en La Barca por ejemplo, si tú vas para allá pregunta a las señoras, allá tienen que comprar agua para regar las plantas de las casas, porque el agua de la llave se las mata, se las seca”.

La contaminación en las aguas de la región y la afectación en la salud de las personas que esto puede conllevar, ya ha sido documentado desde diferentes organismos, como la macrorrecomendación de la CEDHJ en 2009, que dio 68 recomendaciones a municipios de la cuenca del Río Santiago y que a 13 años, algunos han presentado avances hasta en 52 de estos puntos, o en contraste, apenas 4 0 2 avances, como Ocotlán y Poncitlán, según el micrositio habilitado por la comisión para dar seguimiento al caso.

También La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) adoptó el 7 de febrero de 2020 la Resolución 07/2020, mediante la cual otorgó medidas cautelares a favor de pobladores de las zonas aledañas al Río Santiago, tras considerar que se encuentran en situación de gravedad y urgencia de riesgo de daño irreparable a sus derechos a raíz de una presunta contaminación ambiental en el Río Santiago y el Lago de Chapala en el estado de Jalisco.