Guadalajara, Jalisco.

El gobernador de Jalisco Enrique Alfaro, señaló que el crimen organizado es un flagelo para el país, pero la estrategia para enfrentarlo la define el gobierno federal.

Para él no hay debate sobre la presencia de las fuerzas armadas y les dio su respaldo.

En su Cuarto Informe de Gobierno, destacó que los delitos en el estado están por debajo de la media nacional.

Aquí están incluidos todos los delitos, desde homicidios hasta fraudes, suplantación de identidad, todos los robos. Esta es la incidencia delictiva total.

Para quienes dicen todavía que hay una crisis de seguridad, la primer columna es 2018, Jalisco estaba por encima de la media nacional con dos mil 6 delitos por cada 100 mil habitantes. Cuatro años después Jalisco está ya por debajo de la media nacional.

Explicó que los delitos de seguimiento especial representaban el 40 por ciento, pero la mesa de seguridad los separó de los de seguridad pública y ahora son el 24 por ciento.

“Tenemos que diferenciar los delitos que tienen que ver con la seguridad pública del resto de los delitos porque, por ejemplo, los fraudes no son delitos que persiga la policía, no es un tema de seguridad o la suplantación de identidad o incluso la violencia familiar. No son temas de policías y patrullas”.

El delito de narcomenudeo aumentó 16.8 por ciento al pasar de mil 111 a mil 298.

“Creo que todos entendemos que los hechos estridentes, los que generan más ruido, los que nos preocupan, como lo que sucedió en Landmark, como lo que sucedió en Providencia, son evidentemente actos de la delincuencia organizada para desestabilizar y para generar miedo. Así de sencillo porque no son acciones para cometer algún delito de un asalto o de algo que tenga que ver con la seguridad. Son actos de terror”.

Prometió que seguirá del lado de los buenos.

“Se necesita valentía y claridad para decir que aquí estamos del lado de los buenos, que no vamos a cruzar esa raya, que no vamos a permitir que se le vuelva a entregar el gobierno a los delincuentes como sucedió apenas hace algunos años. Eso es nuestro principal compromiso”.

Y remató culpando a los medios de comunicación de generar miedo, dolor y preocupación

que con una “tranquilidad que asusta”, tuercen la información. Incluso acusó de intentos de chantaje al gobierno porque no reciben dinero público.

“Lo que sí puedo decir es que cuando vemos que mejoramos en todo en estos cuatro años, resulta curioso que hay algunos medios que hablen de crisis de seguridad, que utilicen fuentes. Miren esta: la empresa Massive Caller dice que somos el estado más inseguro del país. Medios que no tienen empacho en publicar la fuerte de un narcotraficante asesinado en una plaza pública, haciendo apología de la violencia, que descalifican las cifras sin ningún argumento”.