Guadalajara, Jalisco. 

Las infancias en movilidad humana son sin duda uno de los grupos más vulnerados por los peligros propios de la migración.

Con su paso peligroso por México, un país con territorios completos controlados por el crimen organizado, con instituciones que no garantizan su seguridad, con historias de violencia, nulas oportunidades en sus países de origen y una serie de derechos internacionales de las niñas y los niños que simplemente son omitidos de manera flagrante y rotunda, como detalla el director ejecutivo de Dignidad y Justicia en el Camino A.C. FM4 Paso Libre, Enrique González Araiza:

“Las situaciones de vulnerabilidad, y aquí recordar que la vulnerabilidad es un agente externo, hay un sistema que vulnera, no es inherente como una característica y efectivamente, las infancias en movilidad tienen mayor riesgo de vivir situaciones de vulnerabilidad por esta propia etapa formativa en la que se encuentran". 

Es en estos escenarios de negación de derechos humanos, es que cobran relevancia organizaciones de la sociedad civil como Dignidad y Justicia en el Camino A.C., FM4, Paso Libre, donde reciben a las personas en tránsito mientras resuelven su situación migratoria y donde desde 2019 opera el programa llamado Inclusión Digna.

Dicho programa funciona como un espacio de cercanía con el aprendizaje para abonar a la regularización escolar, cuando aun con legislaciones que en teoría deben admitir a las infancias en movilidad en las escuelas públicas por el lapso de tiempo que estén en México, no sucede en la práctica.

“Atendemos a infancias en movilidad humana y como tal, tratamos de generar proyectos que puedan atender de una forma más integral su propia movilidad, es por eso que en el año 2019 generamos este proyecto que se llama Inclusión Digna que estamos operando junto con una organización internacional que se llama AVSI Internacional.

Lo que tratamos de generar fue construir un modelo de atención a la infancia en movilidad y al mismo tiempo un modelo educativo, pensar que nuestros espacios de atención humanitaria, tienen que dejar de lado esta visión adultocéntrica de atención y enfocarse en una atención hacia las infancias y cuando se habla de las infancias no solamente es tener como esto, un espacio de juegos para ellos, sino que todos los servicios y atenciones tengan una mirada interseccional en pensar a la niñez y todas sus necesidades". 

La situación de las infancias en movilidad humana es tan compleja como las causas estructurales que obligan a las personas a huir de sus lugares de origen, se van cargando en sus espaldas sus sueños, recuerdos, caminan con incertidumbre, sin embargo, la etapa de niñez hace su magia.

Es cansado estar en tránsito, pero también encuentran espacios mejores, como el caso de Isaac, un niño de 10 años que está de paso con su familia en el albergue FM4, festejo su cumpleaños en el tránsito de Estados Unidos a Jalisco, su familia fue deportada y aunque dice que es cansado viajar, también dice que FM4 está mejor, convive con otras 11 niñas y niños en su misma situación y ha comenzado a aprender a tocar la guitarra.

Tan solo en los dos primeros meses de este 2023 y según datos de la Red por los Derechos de la Infancia en México, en el país están de paso 13 mil 506 personas en movilidad de entre 0 a 17 años, el doble de lo que se reportó en el mismo periodo de 2022.

A esta red le preocupa que entre las nuevas caravanas que llegan a México en busca de cruzar la frontera a Estados Unidos, hay decenas de niñas y niños que viajan solos, sin que, hasta la fecha, existan políticas claras para su atención integral.