Ministro alemán de Salud defiende nuevas restricciones por COVID-19
Jens Spahn, ministro alemán de Salud. Foto: Tobias Schwarz/AFP Pool/dpa




Berlín, Alemania.

El ministro alemán de Salud, Jens Spahn, hizo hoy un llamamiento a la población para que apoye las nuevas restricciones acordadas por el Gobierno y los estados federados con tal de frenar la segunda ola de contagios por coronavirus.

"Está en nuestras manos detenerla", dijo en una entrevista concedida a la radio Deutschlandfunk.

Spahn calificó de importante la señal dada por el Gobierno y los estados a través de las nuevas medidas, a la vez que indicó que lo esencial ahora es que las personas respeten su cumplimiento.

Entre las restricciones acordadas el martes, destaca la implementación de un modelo con reglas uniformes en función del número de infecciones por número de habitantes.

Así, la obligatoriedad del uso de mascarillas, la hora de cierre de bares y restaurantes o el tamaño de las reuniones y eventos dependerá de que una región tenga un determinado número de contagios.

De manera concreta, a partir de que una región registre 35 nuevas infecciones por cada 100 mil habitantes en siete días, la obligatoriedad de la mascarilla aumentará y existirá un límite de 25 personas en zonas públicas y 15 en espacios cerrados.

En aquellas que superen los 50 nuevos casos en siete días por cada 100 mil habitantes, las reuniones se reducirán a diez personas tanto en ambientes públicos como privados, los eventos se limitarán a 100 personas y se impondrá un cierre a los restaurantes a partir de las 11 de la noches; bares y discotecas permanecerán cerrados.

El Gobierno y los estados no llegaron a un acuerdo con respecto a la prohibición de alojar a aquellos viajeros procedentes de las regiones con mayor número de infecciones dentro de la propia Alemania y aplazaron la decisión hasta el 8 de noviembre.

Al opinar sobre el carácter de las nuevas restricciones, Spahn declaró que su objetivo era llevar la pandemia a una escala manejable "para que las escuelas, guaderías y tiendas minoristas puedan permanecer abiertas". Añadió que, de tener éxito, se evitarán otros ajustes o incluso un segundo confinamiento total.

Sobre el modelo adoptado, explicó que era importante la posibilidad de imponer restricciones en espacios privados. "No se trata solo de los grandes eventos, sino de cómo nos comportamos en nuestras casas", comentó.

Preguntado acerca del escepticismo mostrado por la canciller alemana, Angela Merkel, Spahn manifestó: "Eso lo veremos en los próximos días. Lo importante es que todos podemos marcar una diferencia cada día".

Spahn se pronunció también a favor de una respuesta coordinada y un marco uniforme en cuanto a las posibles prohibiciones de alojamiento para personas procedentes de las regiones más afectadas. "En las regiones con altas tasas de infección, deben adoptarse medidas", argumentó.