Guadalajara, Jalisco. 

El corte de información que hicieron los funcionarios de Gobierno del Estado el domingo 13 de septiembre después de la apertura de la Línea 3 del Tren Ligero, de Zapopan a Tonalá, no fue muy favorable.

En reiteradas ocasiones Ricardo Valle Favela, director del Sistema Eléctrico de Transporte Urbano (SITEUR), mencionó la palabra “ajustes” para referirse al proceso de operación de la línea y sobre los problemas técnicos del primer día.

La demanda del primer día, este sábado, se notó por la afluencia de personas que se resistían en algunas estaciones a bajarse y tuvieron que meter vagones adicionales para distribuir la sobrecarga, dieron a conocer en la rueda de prensa celebrada a las 12 del día debajo de la estación Zapopan Centro, donde había un cúmulo de personas haciendo uso de las áreas recreativas para la niñez.

Ricardo Valle Favela fue cuestionado por las goteras que fueron una constante que se denunció en redes sociales y a través de varios usuarios en las estaciones del Tren Ligero de la Línea 3. La razón de su presencia; más ajustes.

Una de las justificaciones para crear la Línea 3 del Tren Ligero ha sido durante los 7 años que tardó en construirse, eliminar la presencia de camiones para “mejorar” la movilidad urbana, no saturar el tráfico vial y contaminar menos, así como agilizar viajes largos.

Son 25 rutas de camión las que cambiarán su circuito ya inaugurada la Línea 3 del Tren Ligero, pero el volumen de camiones y concesiones no se modifica.

Solo el sábado, día de la inauguración, subieron más de 35 mil usuarios y el domingo se dio servicio a 75 mil. Se han entregado 20 mil de las 100 mil tarjetas disponibles de uso gratuito.