Guadalajara, Jalisco.

El caso del asentamiento irregular de Pueblo Quieto, situado en el cruce de la avenida Niños Héroes y las vías del ferrocarril, “es ya insostenible”, aseguró el alcalde de Guadalajara, Pablo Lemus Navarro, quien responsabilizó a quienes viven en ese lugar de ser los autores de la mayoría de atracos en la zona de Chapultepec, así como en las colonias Jardines del Bosque, Americana y Arcos.

El foco de atención se puso de nuevo en Pueblo Quieto, luego de que el jueves pasado fue rescatado un hombre de 58 años de edad, quien estaba secuestrado en un pozo de visita clausurado con un candado, en el cruce de la avenida Mariano Otero y las vías del tren, en las cercanías de la colonia irregular.

Lemus hizo un llamado público al gobierno federal, a la Guardia Nacional y a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) para que se haga una intervención en el sitio, ya que al estar junto a las vías del ferrocarril, es una zona federal, donde no entra la Policía Municipal de Guadalajara.

“La situación que se vive desde hace décadas es ya insostenible. Sin embargo, necesitamos abordar el problema de una manera integral. El Ayuntamiento legalmente no puede hacer una intervención directa. Hay que recordar que este predio donde están los asentamientos irregulares de Pueblo Quieto es un terreno propiedad del gobierno federal, por medio de la SCT y que quien lo maneja es el concesionario de los trenes en Guadalajara (empresa Ferromex). Nosotros estamos en la mejor disposición de poder entrar”, aseveró.

Lemus Navarro explicó que la Comisaría de la Policía ubica a los habitantes de Pueblo Quieto como los responsables de la inseguridad en las colonias aledañas, por lo que se requiere de una acción conjunta del gobierno federal con la Policía de Guadalajara.

“Hemos reforzado el patrullaje en toda la zona de la colonia Americana, de la colonia francesa de Chapultepec y ¿saben de dónde viene el problema principal?, de Pueblo Quieto. La gente de Pueblo Quieto va, sale, roba en Chapultepec y se regresa a pueblo Quieto que –repito- es tierra de nadie. Es una tierra del gobierno federal, pero donde pocos entran, es decir, resolver Pueblo Quieto habla también de poder resolver los problemas de inseguridad en la zona de Chapultepec”, aseguró.

Pueblo Quieto comenzó a poblarse en forma ilegal, en el decenio de los años 80, al lado de las vías del tren. Hoy se calcula que ahí viven alrededor de mil personas.

En 2020, la Comisaría de la Policía tapatía presentó un reporte de que ahí se detuvo a 275 personas, como responsables de 90 asaltos a ciclistas y a peatones, a quienes les quitaban sus pertenencias.

En la zona de Pueblo Quieto hay otros ocho pozos de visita, pero no han sido revisados por los policías municipales.

Lemus dijo que le pedirá al titular de la Guardia Nacional en Jalisco se atienda el caso de Pueblo Quieto y se refuercen los patrullajes en los polígonos de la zona oriente de la ciudad, los corredores comerciales de Chapultepec, Providencia y Chapalita, así como el Centro Histórico.