Guadalajara, Jalisco.

Pese al incremento de contagios, de muertes por Covid-19 y el semáforo rojo, el Gobierno de Jalisco mantiene su decisión de regresar a las aulas en educación básica a partir del próximo 30 de agosto.

El gobernador Enrique Alfaro aseguró que los protocolos que se dieron a conocer hace 15 días se encuentran bien definidos para un regreso a clases seguro. Además, desde la Mesa de Salud no existe ninguna modificación planteada en ese sentido.

De esta manera, quien decida no mandar a su hijo a las aulas tiene la opción de no hacerlo, como está contemplado en la estrategia.

“Ese modelo que está haciendo Jalisco nos parece que también ayuda a terminar con este debate de ‘no quiero regresar’. También se vale, pero los que queremos que nuestros hijos regresen, que creo que somos la mayoría, me parece que ya está completamente definido cómo está el protocolo”.

Sin embargo, durante el anuncio de hace 15 días, se especificó que quien decidiera no enviar a sus hijos a las aulas debería comprometerse a hacer una labor autogestiva, porque los maestros no iban a dar acompañamiento a fin de no cargarles el trabajo. El Ejecutivo sólo iba a brindar la plataforma y los docentes evaluarían los resultados de ésta.

Enrique Alfaro dijo que el fin de semana se hará una evaluación sobre medidas adicionales para hacer ajustes en actividades escolares como los comedores, el recreo o las actividades de recreación.

Y frente a la falta de condiciones de infraestructura en ciertos planteles por falta de agua, baños en mal estado o módulos con daños estructurales, aseguró que van en tiempo para tener todo solventado de cara al inicio del ciclo escolar.

De acuerdo con la Secretaría de Educación, son 300 las escuelas que han sido vandalizadas durante la pandemia. A éstas se suman 164 que la Secretaría de Infraestructura y Obra Pública (SIOP) identificó con daños estructurales “graves”, y que ponen en riesgo a 50 mil niños. Solo 16 de ellas serán intervenidas este año.