Dow Chemical presiona a administración Trump




WASHINGTON (AP)

Dow Chemical está presionando a la administración del presidente Trump para que ignore las conclusiones de estudios realizados por científicos federales que señalan que una amplia gama de los pesticidas utilizados son potencialmente peligrosos para cerca de 1,800 especies amenazadas o en peligro de extinción.

Los abogados que representa a Dow, cuyo Director Ejecutivo es un consejero cercano a Trump y otros dos fabricantes de organofosfatos, enviaron cartas la semana anterior a tres agencias del gabinete presidencial. Las compañías les piden a las agencias que “hagan a un lado” los resultados de los estudios del gobierno por considerar que dichos estudios están, fundamentalmente, mal elaborados.

Dow Chemical aportó 1 millón de dólares para apoyar la financiación de la ceremonia inaugural de Trump y su Presidente y Director Ejecutivo, Andrew Liveris, lidera un grupo de apoyo a las actividades de la Casa Blanca.

Andrew Liveris Andrew Liveris, Presidente y Director Ejecutivo de Dow Chemicals

Los requerimientos de la industria surgen después de que el Administrador de la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA por su sigla en inglés), Scott Pruitt, anunciara el mes pasado de que daría marcha atrás a los esfuerzos realizados durante la administración Obama para prohibir el uso de chlorpyrifos, un pesticida fabricado por Dow y usado en alimentos, después de que recientes estudios revisados por pares científicos encontraran que la exposición a éste pesticida, aún en cantidades pequeñas, podría obstaculizar el desarrollo del cerebro de los niños. Anteriormente, como procurador de Oklahoma, Pruitt se involucró personalmente, con cierta frecuencia, en disputas legales que defendían los intereses de ejecutivos y corporaciones que lo apoyaron en sus campañas estatales. Así, archivó más de una docena de demandas que buscaban la revocatoria de algunas de las leyes que ahora, desde su cargo en la EPA debe encargarse de hacer cumplir.

Pruitt se negó a responder las preguntas de los periodistas este miércoles, mientras recorría un sitio contaminado y que está a cargo del programa Superfund en Indiana. Un vocero de la agencia habló con AP para decir que Pruitt no “prejuzgará” ninguna posible decisión normativa a la vez que aseguró que “estamos tratando de restaurar la regulación sanitaria pues es el trabajo de la EPA.”

Las cartas a los Jefes de Gabinetes, fechadas el pasado 13 de abril y obtenidas por la AP están a disposición del público. Al igual que los estudios recientes sobre los chlorpyrifos en los humanos, contratados por Dow a sus propios científicos para refutar de manera extensa, los estudios gubernamentales.

Durante los últimos cuatro años, científicos gubernamentales han recopilado registros oficiales de más de 10,000 páginas que indican que los tres plaguicidas bajo revisión – chlorpyrifos, diazinon y malathion – representan un riesgo para casi todas las especies en peligro que estudiaron. Los reguladores de las tres agencias federales que comparten la responsabilidad para hacer cumplir la Ley de Especies en Peligro, están próximas a emitir los resultados con los que esperan dar lugar a nuevos límites sobre cómo y dónde se pueden utilizar estos plaguicidas altamente tóxicos.

No hemos sostenido ninguna reunión con Dow para discutir este asunto y estamos revisando las peticiones a medida que van llegando, teniendo especial cuidado y consideración con los fundamentos científicos y la formulación de buenas políticas,” manifestó J.P. Freire, Administrador Asociado para asuntos públicos de la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos. “El Administrador está comprometido con escuchar a las partes interesadas que se sienten afectadas por las regulaciones de la Agencia a la vez que revisa las decisiones que se han tomado en el pasado.”

La oficina del Secretario de Comercio, Wilbur Ross, que supervisa el Servicio de Pesca Marina y Natural, no ha respondido a las preguntas enviadas por correo electrónico. Un vocero del Secretario del Interior, Ryan Zinke, quien es el encargado de la supervisión del Servicio de Pesca y Vida Silvestre, remitió las preguntas a la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos.

La evaluación reciente que elaboró la Agencia sobre los chlorpyrifos encontró que este pesticida “probablemente afecte” a 1,778 de 1,835 especies de plantas y animales analizados como parte de este estudio, incluyendo especies de ranas, peces, aves y mamíferos amenazados o en peligro de extinción. Resultados similares fueron hallados para el malathion y el diazinon.

En una declaración, la subsidiaria de Dow que vende chlorpyrifos aseguró que sus abogados solicitaron a la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos que retirara su evaluación biológica del producto por considera que “su base científica no era confiable”.

“Dow AgroSciences está comprometida con la producción y le mercadeo de productos que ayudan a los granjeros norteamericanos a alimentar al mundo y lo hacemos con total respeto por la salud humana y el medio ambiente, incluyendo a especies amenazadas o en peligro de extición,” decía el comunicado. “Estas cartas y los análisis científicos detallados que las soportan, demuestran dicho compromiso.”

FMC Corp., que vende malathion, aseguró que retirar los estudios de la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos permitiría disponer del tiempo necesario para recopilar los datos científicos “mejor disponibles”.

“El malathion es una herramienta fundamental para la protección de la agricultura de plagas dañinas” manifestó la compañía.

El fabricante de Diazinon, Makhteshim Agan of North America Inc., que hace negocios bajo el nombre de Adama, no respondió a los correos electrónicos con los que se buscaba conocer su posición al respecto.

Defensores del medio ambiente dijeron este miércoles que las críticas a los científicos del gobierno eran infundadas. Los métodos utilizados para realizar las evaluaciones viológicas de la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos fueron desarrollados por la Academia Nacional de Ciencias.

Brett Hartl, Director de Asuntos Gubernamentales para el Centro de la Diversidad Biológica aseguró que los expertos de Dow estaban tratando de obligar a los científicos de la Agencia bajo estándares irreales de recolección de datos que solo pueden ser alcanzados en “condiciones perfectas de laboratorio.”

“No puedes simplemente sacar a un pez en peligro de extinción de su ambiente natural, llegarlo al laboratorio y exponerlo a suficiente cantidad de pesticidas hasta que muera para obtener ese tipo de datos”, dijo Hartl. “No solo está mal moralmente, es ilegal.”

El gas organofosforado fue desarrollado originalmente como un arma química por la Alemania Nazi. Dow ha vendido chlorpyrifos para rociar cítricos, manzanas, cerezas y otros cultivos desde los años sesenta. Es uno de los pesticidas agrícolas más ampliamente usados en los Estados Unidos de Norteamérica, con ventas cercanas a las 2,5 millones de kilos cada año.

Como resultado, rastros de esta sustancia química son comúnmente encontrados en fuentes de agua potable. Un estudio de 2012 elaborado por la Universidad de California en Berkeley, encontró que el 87 % de las muestras de sangre del cordón umbilical analizadas en bebés recién nacidos, contenían niveles detectables de chlorpyrifos.

En 2005, la administración Bush ordenó poner fin al uso residencial de diazinon para eliminar plagas en los patios de las casas como hormigas y gusanos, después de determinar que este químico representaba un riesgo para la salud humana, particularmente la de los niños. Aún así, sigue siendo aprobado para su uso por parte de granjeros que lo rocían en frutas y vegetales.

El Malathion es ampliamente usado para controlar mosquitos y moscas de las frutas. Además de ser un ingrediente activo en algunos champús medicados para el tratamiento de los piojos en los niños.

Una coalición de grupos de ambientalistas ha luchado en los tribunales por años para estimular a la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos para que examine más de cerca los riesgos que representan para los seres humanos y las especies amenazadas o en peligro de extinción el uso de los plaguicidas, especialmente, los organofosforados.

“Las especies amenazadas son el canario en la mina de carbón,” dice Hartl. Dado que muchas de las especies amenazadas son acuáticas, dijo que son las que más a menudo muestran primero los efectos de la contaminación química a largo plazo en los ríos y lagos usados como fuentes de agua potable para seres humanos.

Dow, que gastó más de USD$13,6 millones en cabildeo en 2016, ha ejercido durante mucho tiempo un poder político sustancial en Washington D.C. No hay indicios de que la influencia del gigante químico haya disminuido.

Cuando Trump firmó una orden ejecutiva en febrero pasado, ordenando la creación de grupos de trabajo al interior de las agencias federales para revertir las regulaciones gubernamentales, el Director Ejecutivo de Dow, se encontraba al lado de Trump.

Andrew, me encantaría agradecerles por haber reunido al grupo de trabajo por primera vez y por el fantástico trabajo que han hecho”, dijo Trump mientras firmaba la orden durante una ceremonia en la Ofician Oval. Después de la firma, el Presidente entregó su pluma a Liveris para que la conservara como recuerdo.

Rachelle Schikorra, Directora de Asuntos Públicos de Dow Chemical dijo que cualquier sugerencia de que la donación de USD$1 millón para el comité de la ceremonia inaugural de Trump estuviera destinada a influencias las decisiones regulatorias estaba “completamente fuera de lugar”.

Dow participa activamente en la elaboración de políticas y en procesos políticos, incluyendo contribuciones a candidatos, partidos y causas, en cumplimiento de todas las leyes estatales y federales aplicables” dijo Schikorra. “Dow mantiene y está comprometida con los más altos estándares de conducta ética en todas sus actividades

Artículo original de AP: AP Exclusive: Pesticide maker tries to kill risk study

Escrito por MICHAEL BIESECKER

Traducido por John Ospina @jmospina