Guadalajara, Jalisco.

Como en la novela del Nobel Colombiano, Gabriel García Márquez, el surgimiento del INSABI fue la Crónica de una Muerte Anunciada.

El Instituto de Salud para el Bienestar nació con serias deficiencias, sin un diagnóstico y sin una estructura que finalmente colapsó y fue extinguida a través de reformas a la Ley de Salud.

Con este fracaso también quedaron sin terminar obras completas y mantenimiento a centros de salud que habían firmado convenio con este organismo, según datos del Programa Institucional 2020-2024 del INSABI, se encontraban estas remodelaciones y construcciones a no más del 50 por ciento. Ahora será el IMSS Bienestar el que haga sus funciones.

El coordinador de la Licenciatura de Estudios Políticos y Gobierno del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades, Juan Jesús Ramírez Ramírez, explica que con este esquema del IMSS Bienestar lo que se busca es todavía centralizar más los servicios de salud:

“Con el IMSS Bienestar lo que hace es centralizar más esos recursos y se les resta peso la los estados”.

Además agregó que:

“El IMSS Bienestar está diseñado de tal forma que a diferencia del INSABI no está contemplando la participación de los estados, el propio director del IMSS Zoé había declarado que ahora el IMSS centralizaría esos recursos por eso se habla de una mayor centralización en este caso en el acceso a la salud, es un pasito más a la centralización, es el gobierno federal el que toma las atribuciones”.

Los recursos del INSABI serán transferidos al organismo público IMSS Bienestar.

La población en general, sin derechohabiencia, será atendida ahora por el IMSS Bienestar, pero en la actualidad se desconoce bajo qué criterios, a que clínicas podrán ir para recibir atención médica y recibir medicamentos, también se desconoce si atenderá todas las enfermedades y estudios como lo hacía antes el Seguro Popular, ya que el INSABI había reducido la cantidad de padecimientos que atendía y también se desconoce bajo qué criterios serán atendidos:

“Lo que está por definirse o generar estrategias es como trasladar el INSABI totalmente al IMSS Bienestar porque de la noche a la mañana aumenta de manera muy radical el número de personas que deberá atender”.

Por su parte, los senadores panistas denunciaron que la desaparición del INSABI implica limpiar un desfalco de 400 mil millones de pesos y por ello atacan a las instituciones de transparencia.

Denunciaron que el INSABI cuenta con 543 contratos vigentes para este año que no pueden cancelarse, incluso algunos de ellos son plurianuales hasta 2024.

El monto total de los contratos oscila los 15 mil millones pesos, la mayoría corresponden a farmacéuticas para la compra de medicamentos, materiales de curación y aparatos médicos, entre otros. Existen también contratos con empresas de seguridad, vigilancia, tecnología y limpieza.