Hacer documentales en México se ha vuelto actividad de alto riesgo




Guadalajara, Jalisco. 

Documentalistas y activistas compartieron medidas de seguridad para filmar en México, lo cual con la situación de violencia es prácticamente jugarse la vida.

El documentalista Everardo González y la activista de la organización civil Artículo 19, Paula Salcedo, compartieron medidas de seguridad para filmar en México durante el Festival internacional de Cine de Guadalajara (FICG) en su edición 35.

Everardo González dijo que un ejemplo paradigmático de que en México se ha vuelto peligroso filmar, es lo que ocurrió con los estudiantes de cine desaparecidos y asesinados en 2018 en Guadalajara. 

“Filmar la realidad se ha vuelto un riesgo, aunque filmes la vida en un mercado. Y lo que está mal es el Estado, que no otorga la seguridad. Y cuando nuestro trabajo depende del mercado que es muy caprichoso y le importa poco el riesgo del equipo de producción, simplemente si no les interesa el trabajo se guarda en gaveta y todo se fue a la basura porque la película no será vista”. 

Everardo González explicó que cuando filmaron “La Libertad del Diablo”, una forma de protegerse fue no generar rumores en las poblaciones, acudir a zonas neutras y no vulnerar territorios dominados por grupos criminales, y tampoco depender del cine directo que apela al sensacionalismo pues eso implica muchos riesgos.

Everardo González además consideró que en México sí existe riesgo a la libertad de expresión no en términos de los años 70 pero sí de forma sutil, con la desaparición del FONCA, y en maneras más burdas, como los ataques por fobias ideológicas contra la Feria internacional del Libro.