Guadalajara, Jalisco. 

Edgar Aguilar es estudiante del Centro Universitario de Ciencias Exactas e Ingenierías (CUCEI) de la Universidad de Guadalajara y consiguió un intercambio académico a la Universidad del Norte, en Barranquilla, Colombia.

Todo marchaba bien en su estancia académica hasta que a principios de marzo la pandemia de coronavirus lo obligó a él, junto con el resto de la población colombiana, a quedarse aislado en la casa que renta tomando clases en línea.

En vista de que los cursos ya no se reanudarán este semestre, Edgar se organizó con otros 19 estudiantes mexicanos quienes consiguieron el apoyo de la Universidad del Norte y de la

Embajada de México para regresar al país vía terrestre, pero a un día de comenzar su viaje, las autoridades mexicanas les quitaron el respaldo y se quedaron en Barranquilla.

"Hicimos maletas, nos dijeron ‘sí, chicos’ su embajada les va a ayudar a llegar a Chiapas,

teníamos todo, horas antes de salir hacia Bogotá nos dijeron ‘saben qué, su embajada no nos mandó su salvoconducto, no nos dio autorización’, nos tuvimos que quedar, tuvimos que volver a pagar mes de renta”.

"De hecho un día ante fuimos a comprar cubrebocas, gel antibacterial, pensábamos pasar la cuarentena en Chiapas para no llegar con nuestros familiares por si llegaba a pasar algo y de ahí íbamos a hacer nuestro coste desde Chiapas hasta Guadalajara, lo que queríamos era ya regresarnos porque no tiene caso estar aquí, pagar renta".

La aspiración de Edgar y sus 19 compañeros se vio truncada y ahora atraviesan una difícil

situación económica, pues en su caso no ha recibido beca y sus padres en Guadalajara,

también castigados por la contingencia sanitaria, tienen dificultades para mantenerlo en el

intercambio.

“A mí no me han depositado la beca de UdeG, no sé por qué, ya me llegó confirmación. Igual es gasto para mi familia, ahorita en México no hay mucho trabajo y los ingresos están disminuyendo”.

Como Edgar hay más de 100 estudiantes mexicanos varados en Colombia, a la espera de que las autoridades mexicanas intervengan con un vuelo humanitario para que puedan regresar a su país de origen.