Guadalajara, Jalisco.

Las enfermedades autoinmunes y reumáticas no sólo afectan a los adultos, sino también a los niños, lo grave es que el diagnóstico en ocasiones llega muy tarde y los pequeños presentan deformidades y daño a veces irreversible, advierte el reumatólogo pediatra Víctor Manuel Menchaca:

"Entonces es muy importante creerle si el niño está diciendo que tiene dolor persistente, dolor recurrente en sus huesos hay que hacerle caso y llevarlo a valorar".

Otra razón por la que no son diagnosticados a tiempo los niños con enfermedades reumáticas es porque hay muy pocos especialistas, en todo el país son poco más de 100 y en Jalisco es todavía más baja la cantidad de estos subespecialistas, no llegan a 10 y todos están en la Zona Metropolitana de Guadalajara y de estos sólo cuatro laboran en hospitales públicos, por lo que urge que abran más plazas para reumatólogos pediatras:

"Ahorita debemos de ser a lo mucho 110 recertificados menos, habría que ver con el Colegio pero nos dijeron que eran alrededor de 40 mas o menos que ya estaban certificados mas los que vamos saliendo ahorita y aquellos que tienen la certificación en Jalisco seríamos unos ocho o nuevo más o menos".

Pero ¿cuáles son los síntomas de alarma para que los padres acudan con el especialista y lograr el diagnóstico de manera pronta?

"El primero de ellos es la fiebre pero no la fiebre que nos da por un resfriado o por alguna Infección en la pancita, sino aquella fiebre que tienda a recurrir si un paciente tiene fiebre recurrente que se esté enfermando cada mes o dos meses y si esto persista por un tiempo prolongado es un candidato a que lo valore un reumatólogo pediatra, si es un paciente con fiebre de alto grado sin causa aparente ya en el hospital también tiene que ser valorado, aquellos pacientes que tengan lesiones en la piel que se asocien a otroa síntomas como pérdida de peso, fiebre, incremento de la pancita o algún otro síntoma".

Otros síntomas son ojos rojos recurrentes sin causa aparente o caída del cabello.

Se estima que una de cada 100 personas vive o vivirá con una enfermedad autoinmunes y de éstos el 30% debuta en la infancia ya sea en los 5 a 6 años o en la adolescencia.