Guadalajara, Jalisco.

Frente al desalojo que ocurrió el jueves pasado en el “Parque Resistencia Huentitán” por agentes de la Fiscalía Estatal vestidos de civiles, con armas y vehículos sin rótulos contra vecinos y jóvenes que defienden este terreno, el gobernador, Enrique Alfaro, respondió que se hizo lo correcto porque es propiedad privada.

Aseguró que ese sitio pertenece a particulares porque fue vendido hace 14 años y ellos estaban en su derecho de pedir este desalojo.

“Porque, insisto, cuando alguien invade propiedad privada, pues me parece que tolerarlo es un camino al desastre. Todo mundo tiene derecho a exigir que se respete su propiedad y eso fue lo que sucedió en Huentitán”.

Aseguró que ningún parque se está destruyendo ni se atenta contra el medio ambiente.

El mandatario incluso desacreditó el rescate que hacía este movimiento del predio en donde se busca llevar a cabo el desarrollo inmobiliario Iconia. Esto pese a que, durante 144 días, el grupo de ciudadanos hizo plantación de árboles, actividades recreativas y rescate de espacios al interior del mismo.

Pero, para el gobernador, eso “ni siquiera es un parque”.

“¿Cuál parque de Huentitán? De lo que estamos hablando de ese tema de Huentitán es que, en un predio que es propiedad privada desde hace 14 años, se metió un grupo de personas, los dueños del predio denunciaron, un juez dijo que estaban invadiendo el predio y se hizo un desalojo. ¿Cuál parque? El parque está cruzando la calle. A los personajes que andan en estas agendas, yo de entrada les sugeriría que se compren un GPS”.

Los vecinos, activistas, especialistas y estudiantes argumentan que este aún es predio público porque, tras el convenio donde el Ayuntamiento de Guadalajara lo cedió, las empresas involucradas nunca cumplieron con las obras prometidas como contraprestación.