Guadalajara, Jalisco.

En acato a una orden judicial, el Ayuntamiento de El Salto clausuró este miércoles las obras de construcción del fraccionamiento El Mirador, que desde el 2019 ha sido denunciado ante diversas instancias por activistas quienes han evidenciado irregularidades en el proyecto que ponen en riesgo a sus actuales y eventuales moradores.

De acuerdo con integrantes del colectivo Un Salto de Vida, quienes obtuvieron una orden del Juez Décimo Quinto de Distrito en Materia Administrativa para detener los trabajos en El Mirador, el complejo habitacional excede la densidad dispuesta en los planes parciales, carece de dictamen ambiental, de protección civil y de uso de agua potable.

Se trata de un proyecto para construir casi 6 mil casas donde podrían vivir hasta 25 mil personas en una zona de alta degradación ambiental, pues se encuentra a menos de 1.8 kilómetros de distancia del relleno sanitario Los Laureles, a pesar de ello, ya ha logrado vender algunas viviendas que son habitadas por más de mil personas, no obstante, la reciente clausura impedirá que siga avanzando el desarrollo inmobiliario.

El activista Alan Carmona relató el pasado lunes cómo este proyecto ha logrado prosperar con el aval del municipio, a pesar de incurrir en dichas irregularidades.

"Una de las promesas de campaña del hoy presidente municipal y que reiteró tomando el poder fue que no otorgaría nuevas licencias y se amparan en que esta licencia fue otorgada en 2010 por el entonces presidente municipal Gerardo González y lo que hicieron fue una renovación de la licencia y con ello dicen que no estaba en sus manos pero el juez determina que sí son competentes para realizar la clausura".

Los activistas advirtieron a los actuales habitantes de El Mirador sobre los riesgos administrativos, financieros y de salud pública que corren al habitar allí, ya que las etapas concluidas del fraccionamiento no cuentan con permisos de habitabilidad que garanticen condiciones de seguridad para los vecinos.