Guadalajara, Jalisco.
La astrónoma y científica Julieta Fierro Gossman no tuvo un modelo femenino a seguir en la ciencia, pero lo que sí tuvo fue acceso a muchos textos científicos y referentes que fueron hombres; sin embargo, conforme su carrera avanzó encontró a algunas mujeres que conoció y admiró.
En la ciencia se necesitan más grupos multidisciplinarios, diferentes géneros y diferentes perspectivas.
“Muchas niñas y mujeres quieren estudiar, pero también quieren ser madres jóvenes: necesitamos leyes y dinámicas en la sociedad más justas. Si quieres ser científica y madre: ¡hágalo!, y pide ayuda”, sugirió Julieta.
Durante su participación por el Día Internacional de la Cultura Científica, Fierro Gossman recordó que la UNESCO recientemente creó un instituto de educación para que las personas estudien lo que quieran y cuando quieran, además de promover la posibilidad de siempre tener una educación híbrida: presencial y virtual.
Divulgación científica como motor de desarrollo tecnológico
Recalcó que la ciencia crea conocimiento y nos puede llevar a innovaciones tecnológicas, pero el proceso debe ser más consciente sobre los costos asociados. “No podemos seguir saqueando a la naturaleza, necesitamos innovaciones que nos resuelvan muchos problemas a la vez, pero los científicos no sabemos comunicar a los industriales ni escuchar sus necesidades”, mencionó Julieta.
Para que haya ciencia aplicada que favorezca al pueblo de México, se necesita ciencia básica. “Se dijo que teníamos una vacuna mexicana, "Patria", pero no. Las espículas para hacer vacunas estaban en Texas y esta vacuna no prosperó porque no hubo apoyo para los científicos mexicanos”.
“Se dijo que teníamos una vacuna mexicana, "Patria", pero no", Julieta Fierro.
Señaló que la administración actual no está favoreciendo el desarrollo científico. “Centros de investigación mandaron a sus estudiantes a hacer posgrados en otros países pero al volver no encontraron plazas de trabajo. Pero sí hay oportunidades con la ciencia en otros lugares y se necesita la colaboración de todos los países”.
¿Cómo mantenemos el asombro y la curiosidad de los niños por el mundo?
La científica habló de cómo las niñas pierden cierta curiosidad cuando no tienen constante estimulación temprana, pero esto cambia conforme a la edad. “Por eso los adolescentes son difíciles de entender, porque no comprendemos que su cerebro comienza a pensar de otra forma”.
Para mantener el asombro y la curiosidad en niñas y niños, la astrónoma cree que no debemos hablarles mal de la ciencia: “Uy, pobrecito, tendrás clases de matemáticas”; pero lo que sí podemos hacer es acercarlos a estímulos diversos: conocimiento, paseos, conciertos de música.
Uno de los enigmas no resueltos que fascinan a Julieta Fierro es la energía oscura.
“El conocimiento produce placer y para eso se necesitan divulgadores. Cada vez que sabemos más, nos damos cuenta que sabemos muy poco: necesitamos explorar más, aún hay mucho qué investigar”, concluyó Julieta.