A días de iniciar el carnaval, no hay solución a la contaminación acústica en Autlán
La edición 2019 del Carnaval Autlán tuvo ingresos por 30 millones 655 mil 226 pesos con 77 centavos/Foto: Medios




Guadalajara, Jalisco.

Fueron más de 700 personas las que firmaron una petición para reducir la contaminación acústica en la cabecera municipal de Autlán, la cual es “ocasionada por bares y centros de diversión que operan al aire libre, así como por la pirotecnia de los templos de la ciudad”, sin embargo, a días de que inicie el Carnaval 2022, festividad que aumenta la cantidad de ruido, no hay una propuesta concreta para resolver la situación.

La petición fue entregada a las autoridades municipales el 8 de enero por el colectivo Ecolocos Autlán, posteriormente miembros del colectivo se reunieron con el presidente municipal, Gustavo Robles Martínez; el director de Reglamentos, Alonso Cobian; el comisario de Seguridad Pública, Jorge Daniel Rentería, y el titular del Instituto de la Juventud, Francisco Pelayo.

Tras dicha reunión, se acordó que los establecimientos nocturnos tendrían que cerrar o bajar el volumen de la música a partir de las 12:00 de la noche, aunque la norma oficial mexicana establece que las fuentes fijas deberán reducir sus niveles de ruido a partir de las 22:00 horas, así lo explica una de las ciudadanas que respalda esta petición.

“No iban a dejar que la música durara más de las 12:00 (am), lamentablemente el reglamento municipal no sigue estrictamente lo que dice la ley. La ley dice que a partir de las 10 de la noche deben disminuir los sonidos que impactan a la salud pública, sin embargo, en el reglamento se decidió que fuera hasta las 12:00”.

De acuerdo a la ciudadana, quien también es integrante del colectivo, en la reunión también se acordó que el municipio compraría el equipo necesario para la medición de ruido y que Seguridad Pública atendería las denuncias de este tipo hechas por los ciudadanos. Sin embargo, a más de un mes de entregada la petición, establecimientos nocturnos mantienen altos niveles de ruido después de las 12 de la noche.

“Nosotros propusimos que los lugares abiertos que están emitiendo demasiado ruido, estuvieran cerrados para evitar que las ondas sonoras vayan más lejos (…) todos sabemos que no es una prioridad quizá, pero a largo plazo está afectando a la salud”.

Los firmantes buscan resolver un problema de salud pública que afecta sobre todo a personas mayores, enfermos y niños, pues los ruidos frecuentes e intensos que interrumpen el balance natural pueden causar trastornos psicológicos, como desórdenes de sueño y estrés, además de trastornos cardiovasculares, hipertensión, inflamación en el oído y pérdida de la audición.

“Las personas en sus comentarios mencionaban que no podían dormir, sufrían de ansiedad, personas enfermas no podían descansar, y esto se está convirtiendo en un problema de salud pública, el cual no se está atendiendo y no se visibiliza porque se está normalizando que porque es la manera en que el municipio da empleos, la gente tiene que aguantar la situación”.

En 2020, la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ) emitió la recomendación 2/2020 al Gobierno de Autlán, donde se exhortó al municipio a reubicar las instalaciones del carnaval, luego de que vecinos de la zona se quejaran por el exceso de ruido y cierre de calles. La recomendación no se ha atendido hasta el momento.


Gladiola Madera Martínez