Ciudad de México, México.

La Cámara de Diputados de México aprobó este martes la Ley de Austeridad Republicana, considerada una de las principales propuestas electorales del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, y la remitió al Ejecutivo para sus efectos legales.

Con 321 votos a favor, 124 en contra y una abstención, los diputados aprobaron en lo general y lo particular el dictamen que expide la expide la Ley Federal de Austeridad Republicana y reforma las leyes General de Responsabilidades Administrativas, y la Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria.

El debate parlamentario tuvo como centro las modificaciones que el Senado de la República hizo a los artículos 17 y 24 de la Ley de Austeridad, al devolverla a la Cámara de Diputados para su revisión, señalaron fuentes legislativas.

El artículo 17 establece la prohibición de fideicomisos o mandatos en las materias de salud, educación, procuración de justicia, seguridad social y seguridad pública.

Y el artículo 24 establece la prohibición para que los funcionarios de mando superior que se separen de su cargo no podrán trabajar durante 10 años para empresas a las que hayan supervisado, regulado o de las cuales hayan tenido información privilegiado.

El diputado Erasmo González Robledo, del gobernante Movimiento Regeneración Nacional (Morena), explicó que el objetivo del dictamen aprobado es "garantizar que la política de austeridad repúblicana persevere en el tiempo".

El documento se propone una definición amplia, clara y necesaria de lo se debe entender por austeridad republicana; además de precisar que el plazo por el cual los servidores públicos de mando superior no podrán emplearse en empresas privadas, será de 10 años, explicó.

La Ley de Austeridad Republicana también canceló las pensiones que cobraban los expresidentes de México tras cesar en sus cargos, otra de las banderas electorales con las que López Obrador ganó la presidencia en las elecciones del 2018.

Bajo estas nuevas disposiciones, se prohíbe la contratación de seguros privados de gastos médicos mayores, de vida así como de separación individual o colectiva.

Se prohíbe también que las dependencias del gobierno y los funcionarios compren mobiliario de lujo y hagan remodelaciones de sus oficinas por cuestiones estéticas.

La austeridad republicana es una de las principales banderas del presidente López Obrador, que además de reducir su salario a la mitad de lo que cobraba su antecesor, ha calificado como inmoral que los funcionarios al dejar sus cargos trabajen para empresas privadas de sectores estratégicos.