Guadalajara, Jalisco.

Aun cuando Temacapulín, Acasico y Palmarejo le dieran luz verde a la alternativa sugerida por el Presidente Andrés Manuel López Obrador para la Presa El Zapotillo, el gobernador Enrique Alfaro aclaró que ésta entraría en operación al final del sexenio, ya que todavía falta consolidar obras por 10 mil millones de pesos.

De esta cantidad, alrededor de tres mil millones serían para terminar el embalse y siete mil millones para la Presa Derivadora y Sistema de Bombeo El Purgatorio. Mientras tanto, se invertirían mil 200 millones de pesos en la red El Salto-Presa Calderón, como solución inmediata a la escasez de agua en el Norte de la ciudad.

El gobernador subrayó que esta propuesta no es la más idónea, pero es la salida al problema social y que aun así quedarían varios problemas por resolver: el abasto de agua para León y la Región de Los Altos, así como el destino de la inversión que se hizo en la construcción del poblado alterno "Talicoyunque" para mudar a los posibles desplazados.

Sin embargo, dejó en claro que esas decisiones no son de su competencia.