Por: Nancy Ángel

Esmeralda Matute Villaseñor, Doctora en Neuropsicología y Neurolingüística, detalla que en México existen más de 85 millones de adultos, o personas mayores de 18 años y en Jalisco suman cerca de 5 millones y medio de adultos y señala que es en la adultez cuándo surge un declive de las funciones mentales, aunque específica, este declive no es igual para todas las funciones mentales.

Menciona que con el paso del tiempo el ser humano se vuelve más lento, torpe, menos fluidos en las conversaciones y presenta cierto olvidó y esto es completamente normal, ocurre a toda la población adulta, pero detalla que en algunas personas algunas características ocurren primero.

Menciona que en la población mayor de 60 años aparece una complicación mayor porque es a partir de aquí cuando empiezan a preocupar una posible demencia, aunque específica, se puede tener demencia antes de los 60 años y define que existen dos tipos de envejecimiento, el envejecimiento normal y el envejecimiento patológico y especifica que este segundo tipo consiste en una repentina disminución de las facultades, al grado de que la personas ya no puede ser autosuficiente y a este tipo de envejecimiento patológico es lo que se le conoce como demencia.

Define que la demencia es un deterioro progresivo de la memoria y otros aspectos del pensamiento en adultos y puede tener muchas causas, no solamente alzheimer, ya que la demencia tiene distintas causas como lo son golpes en la cabeza, infartos cerebrales, desnutrición, entre otras.

Detalla que los signos de alzheimer son: la pérdida de memoria, confusión, cambios en el comportamiento y se presenta cuando hay acumulación de ciertas sustancias en el cerebro y esas sustancias afectan a las neuronas provocando que mueren o dejan de funcionar.

Detalla que la enfermedad de alzheimer familiar no afecta si los padres no tienen el gen alterado para desarrollar esta enfermedad, sin embargo, se puede saber si se heredó desde antes del nacimiento, ya que menciona que desde antes de nacer, se puede saber si el padre o madre es portador del gen con un análisis de sangre.

Además, detalla que en México existen alrededor de 40 familias con este gen y muchas de ellas tienen sus orígenes en Jalisco, y define cómo es el panorama en la Región Altos: “En los Altos, estamos interesados porque nadie lo estudiado, de ciertos datos, estudiar ciertos problemas motores, dificultades de lenguaje expresivo y las funciones ejecutivas”.

Menciona que actualmente se busca apoyo para ayudar a retardar el desarrollo de las limitaciones que impone este enfermedad para que la persona pueda ser autosuficiente por más tiempo así como guías para el cuidador material para ejercicios de memoria censo de la población asesoría psicológica entre otros