El proceso creativo: una cosa universal
Alfonso Cruz en ECOS FIL 33




Por Aarón Navarro Aguirre

En el programa Ecos de la FIL, que extiende sus actividades al resto de la red de la UDG, los alumnos de la Preparatoria Regional de Lagos de Moreno disfrutaron una muy amena e interesante charla sobre literatura y creación con el invitado Alfonso Cruz, escritor, cineasta, músico e ilustrador portugués, autor de libros como Carne de Dios, La muñeca de Kokoschka, y Jesucristo bebía cerveza.

El creador portugués fue recibido en el salón central del edificio de investigación del CULAGOS en donde los alumnos de la preparatoria regional mostraron su respeto y admiración colocando varias sombrillas en alusión a su obra Donde están los paraguas. Pero sobre todo, los alumnos no podían contener sus inquietudes al preguntarle a Alfonso Cruz cosas que tienen que ver con el quehacer literario y el proceso creativo.

“El trabajo de un escritor no es tanto escribir. No pasamos ocho horas escribiendo por día. Eso sería imposible. Lo que pasa es que los escritores pasan mucho tiempo haciendo nada. Pensando en sus personajes, en sus historias, leyendo. Leer para mí es muy importante, pero no pasamos ocho horas escribiendo. Ésa no es la principal actividad de un escritor por increíble que parezca.”

La mayoría de las preguntas de los alumnos de la preparatoria regional versaban sobre el proceso creativo que sigue el autor para sus obras tanto musicales, literarias, ilustrativas, o de otras índoles. Alfonso Cruz aludía siempre al factor de la atención. Es decir, la atención como herramienta central a la hora de tomar inspiración. Siguiendo la idea de la pantextualidad que dice que el mundo es un texto, el autor portugués asegura y aconseja a los participantes a su charla que no discriminen las historias que cuentan sus familiares, o cualquier persona en general.

Y como un segundo apunte muy importante, tiene que ver con concebir la vida humana como una obra de arte, no por añadirle un sentido romántico, sino porque empata con el sentido esencial del arte, que es del de la creación. El autor, entonces, invita a pensar que el arte es una cosa intrínseca a las vidas de las personas en todos los sentidos.

“Toda la gente piensa que el arte es una parte muy pequeña de nuestras vidas. Es cuando vamos al cine, o leemos un libro, o entramos en un museo. Pero no es verdad. Todo lo que nos hace seres humanos no nació con nosotros. Nuestra cultura, leer, hablar, la ropa. 49:48 Todo lo que no nació con nosotros es cultural. Inventar siempre es un proceso artístico”.

El público se comportó como una audiencia preparada, pues las preguntas hacia el autor eran dudas que tenían que ver con varias de sus obras.

Al final tres alumnos de la preparatoria regional pudieron compartir un momento especial con Alfonso Cruz, pues mientras ellos tocaban la guitarra, el autor cantaba el tema Moving Slowly.