Incinerar basura en Autlán: retroceso en el desarrollo sostenible de la región
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Autlán de Navarro, Jal. 

Por Antonio Díaz 

Implementar plantas de incineración de basura sería un retroceso en el manejo de residuos sólidos urbanos, señaló el maestro en ciencias en educación ambiental, Salvador García Ruvalcaba.

Esto luego de que el presidente municipal, Miguel Ángel Íñiguez Brambila, planteara la incineración como una alternativa ante la problemática de exceso de basura en el municipio. En el programa oficial “Cómo estás Autlán” el alcalde dijo que con la incineración de residuos se podría generar electricidad y materiales de construcción.

Sobre el tema, García Ruvalcaba quien tiene más 20 años de experiencia en el manejo de residuos, mencionó que implementar dicha estrategia contrapone el trabajo de educación en desarrollo sostenible y conservación de recursos naturales que se ha realizado en la región.

"Somos una región reconocida por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) por escalar en proyectos de desarrollo sostenible y conservación de los recursos naturales, uno es la iniciativa intermunicipal que culmina con la creación de la Junta Intermunicipal del Río Ayuquila.  Los países que tenían incineradoras van hacia la generación de basura cero, reducir la cantidad de basura que generan".

Explicó que algunos inconvenientes de las plantas incineradoras son; la emisión de contaminantes a la atmósfera, las dioxinas cancerígenas que se expiden y la generación de residuos y cenizas volantes en las que van integrados materiales peligrosos, que de ser implementados en obras publicas podrían ser dañinos a la salud.

"Implica por un lado que estarías contribuyendo a la emisión de contaminantes, incluso muchos de esos contaminantes, que no te lo dicen y que ha sido parte de la deuda moral y ética decir lo que está pasando, son las dioxinas cancerígenas. Por otra parte las incineradoras generan residuos y me pueden decir que esos residuos se van a manejar adecuadamente, se van a acumular en tabiques, en la construcción, en mejora de avenidas, pero ojo, ahí van materiales peligrosos".

Los contaminantes procedentes de una planta incineradora se dispersan en el aire, por lo que la población cercana a la planta se expone directamente por inhalación o indirectamente al consumir comida o agua contaminada por las sustancias que se depositan en el suelo, la vegetación y el agua. Los efectos potenciales de metales pesados y otros contaminantes persistentes en el medio ambiente, se extienden más allá del área donde se sitúa la incineradora.

Necesaria una fuerte campaña de educación ambiental antes de retirar contenedores

El maestro García Ruvalcaba también señaló respecto al manejo de residuos, que retirar los contenedores de basura en Autlán para disminuir el problema de recolección es una decisión que se debe tomar acompañada de una fuerte campaña de educación ambiental que involucre a la ciudadanía.

Dijo que aplicar esta estrategia sin considerar a los ciudadanos podría ser contraproducente y convertirse en un problema de basura en las calles. "La gente debe ser consciente de los daños que éstos generan a la salud y medio ambiente", comentó.

Comentó que sería necesario trabajar en el acopio de residuos orgánicos con una campaña de educación que involucre a las comunidad educativa, para posteriormente permear en las familias autlenses.

"La solución de mayor impacto, alcance y durabilidad es la educación y una cultura de participación y prevención", dijo el investigador.

Otros municipios de la región, como es el caso de El Grullo han apostado al programa basura cero, que consiste en la separación de residuos desde su origen y el aprovechamiento de los recursos que de ellos se generan.


Gladiola Madera Martínez