El día del hombre: una oportunidad para pensar




Por Aarón Navarro Aguirre

En 1992 el profesor de la Universidad de Missouri Thomas Oaster sugiere el establecimiento del día del hombre, aunque fue en 1999 cuando se popularizó masivamente como el día internacional del hombre gracias a la UNESCO.

Esta fecha se generó para reflexionar otros tipos de masculinidades u otras formas de ser hombre que no sean violentas, que renuncien al machismo, y que sirvan como otras posibilidades de existir.

El doctor Ángel Christian Luna Alfaro, profesor e investigador del CULAGOS, y quien mira de cerca el ejercicio de la masculinidad, habla sobre la posibilidad que deja abierta esta fecha:

“Al igual que el día de la mujer, la conmemoración, es decir, la posibilidad de que meditemos y comencemos a reflexionar sobre circunstancias que apremian como los feminicidios, el machismo y demás; entonces, las instituciones públicas y privadas puedan generar actividades, mecanismos, métodos que aspiren a erradicar las anomalías”.

Algunas instituciones, por ejemplo, podrían conmemorar esta fecha dándoles a sus empleados padres el día para que convivan en casa y ejerzan una paternidad afectiva.

Éste sería un punto importante de reflexión en torno la salud emocional de los hombres, pues los casos de suicidio y trastornos afectivos generados en la masculinidad necesitan la atención desde la óptica de los estudios de género, pues muchas de estas consecuencias surgen por una tradición machista impuesta.

Se habla también de la confusión que a veces rodea esta fecha, pues hay quienes piensan que es una fecha festiva y no conmemorativa. Pero esto, señala el doctor Luna, es una cosa que padecen las fechas festivas.

“Éste, ante todo, es un malestar generalizado, prácticamente con cualquier fecha. Por ejemplo, tenemos la expectativa de celebrar la Independencia de México, o la misma Revolución, pero difícilmente vamos a meditar las circunstancias en las que nos encontramos en el terreno internacional. Por ejemplo, de autonomía de un país, y las posibilidades que puede efectuar un Estado en el ámbito de gobernanza, o qué sé yo”.

El doctor Luna Alfaro reitera el hecho de que estas fechas conmemorativas acentúan el hecho de que todavía hay muchas cosas por hacer en el ámbito de la masculinidad, sobre todo, en materia de salud mental.

“Seguimos teniendo estos pendientes de atendernos en el terreno de la salud mental. Me parece que los hombre tenemos muchas ausencias, pero podemos comenzar con eso. No es normal que estemos serios o tristes, o que nos estemos enojando constantemente por cualquier cosa. Este asunto de que así somos y así nos tienen que dejar, gritones o impulsivos. No es propio de algo que hayamos nacido de esa manera. Tenemos que atendernos profesionalmente para que nos den un tratamiento, que desde luego, es de por vida”.