Autlán de Navarro, Jalisco. 

Las condiciones físico geográficas de San Gabriel, la transformación del paisaje por las actividades humanas y los recientes incendios forestales, son factores que influyeron en la catástrofe ocurrida este domingo con el desbordamiento del río de Apango, así lo explicó Enrique Jardel Peláez, investigador del Centro Universitario de la Costa Sur.

El especialista en ecología y manejo forestal, señaló que la subcuenca donde se ubica San Gabriel ha pasado por un proceso histórico de desforestación, que ha eliminado gran parte de la cobertura boscosa y disminuido la retención del agua, ocasionando escurrimientos.

“El efecto de la desforestación ha sido un proceso histórico, podemos observar en los mapas del estudio de ordenamiento ecológico de la Junta Intermunicipal del Río Ayuquila como entre 1972 y 2014 esta subcuenca perdió una extensión considerable de bosque. Este proceso de deforestación continúa con la expansión del cultivo aguacatero”

Indicó además, que el municipio se encuentra sobre un terreno formado por suelos aluviales, ideales para la agricultura pero susceptibles a las inundaciones en caso de precipitaciones extremas.

“Hay ciertas características físico geográficas del terreno que hacen que ciertas áreas sean más susceptibles a inundarse que otras, y es algo que debemos de tomar en cuenta para la planificación del crecimiento de los centros de población para tratar de adaptarnos a esas condiciones y tomar las medidas que prevengan estos desastres”.

El investigador manifestó que los incendios forestales recientes dañaron al menos el 30 por ciento de la vegetación de la cuenca.

“Adicionalmente, este año ocurrió un incendio forestal que prácticamente afectó el 30 por ciento de la subcuenca, por el área donde pasó el fuego pues se consume buena parte de la materia orgánica que está en el piso del bosque y esto reduce la capacidad de absorción del agua”.

Jardel Peláez, señaló que en los 10 municipios que integran la cuenca baja del Río Ayuquila-Armería existen zonas de riesgo ante fenómenos naturales. Riesgos que pueden ser mitigados mediante la conservación de los bosques en la parte alta de la cueca, obras de conservación de suelos en prácticas agrícolas, y el cuidado de la vegetación protectora de los causes.