Por Luz Atilano

Entre las necesidades o problemáticas generadas por la urbanización que por medio de la autogestión ocurre desde hace algunas décadas en la ahora colonia Los Tepetates se encuentra no sólo el mal estado de las calles. De acuerdo con sus habitantes, a esto también se suma la falta de espacios recreativos.

“De espacio recreativos no tenemos nada, nada… no hay canchas, no hay… sólo en Cañada pero ahí ya es otra colonia. Pero no, aquí no tenemos eso, canchas ni áreas verdes”

“No tenemos nada, así de espacios y eso no, ni nada para los niños, de juegos ni nada”, comparten dos vecinas.

Y es que, a pesar de que cuentan con un terreno de varias hectáreas donado en su tiempo por algunos ejidatarios, no se ha logrado apoyo de ningún tipo para que por lo menos sea acondicionado para caminatas y la práctica de algún deporte.

Así lo comparte uno de los donadores de este espacio:

“Y tenemos un terreno aquí enseguida, que desgraciadamente no tenemos cómo limpiarlo. Nosotros como ejidatarios lo donamos a la comunidad… y es como una hectárea y cacho… o sea, son los dos lados, está en un lugar allá arriba. Y precisamente hablaba yo con las personas para ver cómo analizábamos ahorita la situación pues principalmente para la gente que está estresada, que está en las tiendas, que salga un ratito en la mañana o en la tarde a correr. Nada más nos hace falta pues limpiarla, y pues precisamente para los jóvenes…”

Claramente, la colonia carece de espacios de este tipo, pues aunque persisten aún grandes espacios entre las viviendas, éstos no cumplen tal función y, por el contrario, debido a la presencia en exceso de flora silvestre, pueden llegar a prestarse para otros fines e incidir en la inseguridad generalizada en todo el municipio. Hay que decir, quizá el principal motivo por el que los vecinos creen necesario algún parque o área recreativa en su colonia.