Por Luz Atilano

Desde hace aproximadamente trece años, habitantes del pueblo indígena de San Miguel de Buenavista solicitan la construcción de un puente que sustituya al vado con el que cuenta el tramo del río que atraviesa el poblado. Y es que, con el paso del tiempo y el crecimiento del tránsito de particulares y transporte urbano y de personal, éste se ha deteriorado considerablemente y no responde a las necesidades actuales.

“Nosotros tenemos una necesidad muy grande en el pueblo, que es el puente de la calle principal. Se nombra como vado porque ese vado se hizo hace 40 años, donde a lo mejor no había tanto tránsito vehicular, pero ahora para los tiempos en los que vivimos necesitamos un puente, que sea un puente mejor hecho para el paso de los niños a la escuela, para dos carros (porque) ahorita es solamente para un carro”, dice uno de los habitantes de Buenavista.

Sin embargo, la solicitud presentada ante las últimas cinco administraciones, no ha sido realmente atendida. Si bien se les aseguró una obra al respecto desde inicios de la administración 2012-2015, no fue hasta este año cuando el Ayuntamiento de Lagos de Moreno decidió echarla a andar.

Lo anterior, no obstante con un agravante pues, afirman habitantes de Buenavista, se les informó que el proyecto no contemplaba la construcción de un puente nuevo, sino la ampliación del vado existente; acción que no resuelve las problemáticas señaladas y que derivó en la rotunda oposición del pueblo hacia la obra en un acto público el pasado 24 de julio, cuando se pretendió dar inicio a la misma.

“En estos días nos han visitado las personas de Obras Públicas que nos querían hacer la ampliación del vado, pero por unidad del pueblo y por la necesidad que hay no estuvimos de acuerdo, nadie estuvo de acuerdo en que se hiciera eso porque no tiene caso que a lo mejor un vado en vez de beneficiarnos nos perjudica más porque más abajo, a dos metros de donde lo querían hacer, pasa un tubo de 8 pulgadas, de drenaje, con una base de piedra y cemento que todavía sería más peligro para el pueblo porque haga de cuenta que sería una represa, bordearía todavía más sobre el vado. No nos solucionaría nada y no estuvimos de acuerdo, por lo cual nos dijeron en Presidencia que la obra la aceptábamos como ellos decían o mejor no se hacía nada… y para eso utilizaron la fuerza pública, para empezar a hacerlo… y yo creo que eso no se vale porque nunca hubo una reunión con los vecinos para aclarar si estábamos de acuerdo o no estaban, únicamente llegaron ahí a imponer, no llegaron a tener una comunicación con las personas…”

Habría que añadir que según lo declarado por los habitantes a este espacio informativo, la intervención de las autoridades (incluido el mismo presidente municipal, con quien se reunieron tres días más tarde) dejó mucho qué desear, ya que no sólo omitieron consultarles para atender realmente las necesidades del poblado; sino que, además, no fueron atendidos educadamente cuando acudieron a plantear soluciones, ofreciendo como respuesta final el retiro del recurso económico y no llevar a cabo obra alguna en Buenavista.

Por otro lado, hay que decir que con la intervención que Obras Públicas alcanzó a realizar para dar inicio a la obra de ampliación del puente, se incrementaron los daños al mismo. Y es que, luego de que se determinara que la obra no se llevaría a cabo, el personal de la dependencia sólo abandonó la zona, dejando una grieta más a las dos con las que ya contaba el vado.