Por Gabriela Arreola

Con anterioridad hemos dado a conocer información acerca de una problemática en particular que afecta directamente la vida de los habitantes del fraccionamiento Jardines de las Ceibas; se trata de un canal que pasa a un costado del asentamiento, el cual suele desbordarse en temporada de lluvias e inunda las calles y las casas de algunos vecinos.

Calles de tierra en plena mancha urbana

No obstante, este no es el único inconveniente con el que se tienen que enfrentar los habitantes del fraccionamiento y de la colonia con el mismo nombre, pues la mayoría de los accesos y calles son de tierra, presentan una gran cantidad de baches y evidentemente las dificultades se intensifican con las lluvias.

Algunos vecinos hablan al respecto:

«El problema más fuerte son las calles, las calles no tienen mantenimiento, hay muchísimos baches, ni siquiera está empedrado. Ahorita están partes en las que con el coche es difícil pasarlas porque los hoyos están muy grandes y ya están llenos de agua».

«Nos hace falta porque en esta calle pasan los camiones y ahora ya que está el tiempo de aguas se están haciendo muchos hoyos».

«Pues el camino, nadie ha hecho la lucha de venir a arreglar».

La presencia de baches es algo generalizado en la colonia, debido al nulo mantenimiento por parte de las autoridades municipales. Los afectados indican que el tránsito ya sea en vehículos o a pie es sumamente difícil. En Jardines de las Ceibas, por ejemplo, los menores que acuden a la escuela en Cañada de Ricos, tienen que usar ladrillos para sortear las lagunas del camino causadas por el agua de lluvia.

Sin alumbrado público y a merced de los ladrones

Otra dificultad, de acuerdo a las declaraciones de los vecinos, tiene que ver con la falta de alumbrado público:

«No, incluso ni luz tenemos, nada, aquí no tenemos ayuda del gobierno. En la parte de aquí de atrás está un baldío, ahí está demasiado oscuro, está muy feo».

«El alumbrado también está pésimo, de repente hay calles que están oscuras y la verdad es que es una colonia que no es muy transitada, entonces también la seguridad, pues es peligroso andar solos de noche, caminando, porque está solo, está oscuro».

«Seguido, le digo, ahí no hay alumbrado público, unos dicen que porque no está entregado al municipio, otros que sabe qué y que sabe cuánto. Y ahí está todo oscuro».

La falta de lámparas en la vía pública se relaciona íntimamente con casos de delincuencia y robo a casa habitación según los vecinos de Las Ceibas:

«Pues el alumbrado público de repente nos hace falta y a lo mejor un poco más de seguridad. Sí ha habido asaltos y robos».

«También está mal el alumbrado público, pues hay mucho vandalismo, roban mucho, o sea que hay mucho delincuente, hay mucha inseguridad».

«Más que nada por el alumbrado que no está, los rateros en friega para allá y para acá, uno que ni duerme a veces porque andan en las azoteas».

Las Ceibas y Jardines de Las Ceibas cuentan con una amplia población aunque no lo parezca, argumentan sus habitantes; piden que la siguiente administración no los deje en el olvido como las últimas lo han hecho, pues son demasiadas las necesidades y carencias con las que han cargado desde hace mucho tiempo.