La belleza y la aplicación de la física y la matemática




Por Gabriela Arreola

El doctor Luis Armando Gallegos Infante es Investigador y profesor del Centro Universitario de los Lagos. Llegó al campus en el 2005 y desde entonces ha desarrollado distintas investigaciones colaborando con sus colegas, en todas ellas, utilizando sus conocimientos en física y matemáticas aplicadas.

Gallegos Infante es originario de San Luis Potosí, fue allí donde estudió la Licenciatura en Física Teórica en la Universidad Autónoma de San Luis, después se trasladó hasta Guanajuato y en la universidad de este estado cursó la maestría y el doctorado en Física con especialidad en partículas elementales.

Comprender, no memorizar

El especialista comparte cómo es que desde muy joven supo que su fuerte eran las ciencias duras, las matemáticas y la ciencia:

«De alguna manera a mí me atrajeron siempre más las ciencias exactas, sobre todo lo que eran las matemáticas, física y química, porque eran en las que tenía que estudiar menos, no tenía que memorizar y a mí me molestaba muchísimo memorizar. Entonces, como ahí no tenía que memorizar nada, o muy poco, pues era lo que más me gustaba porque no me costaba tanto trabajo. De hecho, a mis alumnos, cuando doy clase aquí, siempre les llama la atención que mis exámenes son a libro abierto, porque para mí la memoria se hace a un lado, tienen que entender las cosas».

Aplicación de las matemáticas con fines médicos

En la actualidad, al lado de otros especialistas, trabaja en un proyecto para la detección de cáncer.

«Actualmente trabajo con matemáticas aplicadas, lo que tenemos más fresco es el modelado del cáncer, lo que es el diagnóstico del cáncer a partir del nivel de glucosa con un sistema de ecuaciones no lineales y también lo que es el efecto de radioterapia en el tratamiento del cáncer con ecuaciones de tipo reacción difusión. Bueno, aquí en el Centro Universitario de los Lagos estoy en el cuerpo académico de Modelación y Matemáticas aplicadas», explica.

Acerca de los cambios que ha visto en el CULagos desde su llegada hace doce años, Gallegos Infante cree que con el tiempo se han afianzado las diferentes facetas en los especialistas, incluidas la investigación y la docencia.

«He evolucionado bastante, cuando recién llegué nos dedicábamos un poco más a la docencia, pero ahora ya le damos su justo tiempo a cada cosa, a la docencia, a la investigación, a l gestión y pues siento que en general, los compañeros, incluido yo, hemos madurado un poco más en ese sentido, ya somos más independientes al hacer investigación de punta, colaboramos con los mismos compañeros de aquí que son de áreas muy distintas, por ejemplo, yo trabajo con biólogos en esto del cáncer, jamás me hubiera imaginado que llegaría a colaborar con ellos», comparte.

En la parte de la docencia, el doctor dice que le ha ido muy bien, pues ha sido toda una experiencia convencer a los alumnos de que la física y las matemáticas van más allá de fórmulas abstractas y que pueden tener aplicaciones en la vida real.

A la par, uno de los hobbies del Gallegos Infante es tocar el chelo. Dice sentirse afortunado de poder convivir con dos de las creaciones más nobles y bellas del ser humano: la música y las matemáticas.