Guadalajara, Jalisco.
A pesar de que todavía permanece cerrado el templo de San Francisco por reparaciones, la zona de Aranzazú del centro histórico de Guadalajara se prepara para recibir este Jueves Santo a miles de tapatíos para la visita de los siete templos.
En las dos Iglesias, San Francisco y Aranzazú, generaciones de católicos han iniciado este recorrido que simboliza el acompañamiento de los fieles a Jesús desde la noche que fue apresado hasta su crucifixión, pero en los últimos dos años bajó la afluencia de creyentes debido a los cierres en la zona por las obras de la Línea 3 del Tren Ligero.
Julio Mariscal, quien sigue la tradición de su familia de vender empanadas en esta fecha, espera que este año haya más visitante por la liberación de parte de los jardines.
Fotografía: Georgina García
Aun cuando el Centro Histórico todavía muestra los embates de las obras de la Linea 3, luce repleto de visitantes en este periodo vacacional. Los feligreses contemplan seguir con esta tradición, que incluye como parada obligada los templos de Aranzazu, la Catedral Metropolitana y La Merced, y la compra de empanadas.
El ayuntamiento de Guadalajara entregó 280 permisos para la venta de empanadas en esta temporada.
Fotografía: Georgina García
El alcalde, Ismael del Toro informó que esperan abrir para este jueves más áreas para el paso de los creyentes.
“Aprovecharemos para revisar también la posible liberación de espacios confinados para la obra del Tren Ligero en la zona de los templos de aranzazu y también hacer un recorrido de revisión de lo que es la visita tradicional de los tapatíos a los siete templos”.