Tribunal cancela expulsión de escolta de Bin Laden de Alemania




Un tribunal alemán ordenó que sea trasladado nuevamente a Alemania un escolta del abatido líder yihadista Osama bin Laden que había sido deportado horas antes a Túnez.

La expulsión del hombre, identificado solamente como Sami A. según las leyes alemanas de privacidad, es "ilegal y viola los principios fundamentales del Estado de derecho", dictaminó el Tribunal Administrativo de la ciudad de Gelsenkirchen.

Por ello, A. "deberá ser devuelto a Alemania de inmediato a expensas del departamento de extanjería de la República Federal de Alemania". El fallo puede ser apelado ante el Tribunal Superior Administrativo de la región de Renania del Norte-Westfalia.

El hombre fue repatriado a primera hora del viernes a Túnez pese a una orden judicial que bloqueaba su expulsión por la falta de garantías del Gobierno tunecino de que A. no sería torturado.

Considerado por las autoridades alemanas un islamista peligroso, Sami A., de 42 años, abandonó Alemania desde el aeropuerto de Düsseldorf en un vuelo comercial para llegar a su país de origen, Túnez.

Allí fue detenido e interrogado por fiscales antiterroristas, dijo a dpa un portavoz de la fiscalía tunecina. Las autoridades del país norafricano investigan si estuvo involucrado en "actividades extremistas" en Alemania.

El jueves, el Tribunal Administrativo de Gelsenkirchen decidió que de momento no podía ser repatriado por el peligro de que fuese torturado en Túnez, pero el comunicado llegó un día más tarde a manos de las autoridades de migración de Alemania, cuando el tunecino ya se encontraba en vuelo.

El ex guardaespaldas residía en Alemania desde 1997. Formado según los investigadores en un campamento terrorista de Afganistán, tenía desde hace años obligación de comparecer a diario ante la Policía germana debido a que estaba considerado una "amenaza seria para la seguridad pública".

A finales de junio, la Policía lo detuvo cuando se personó en la comisaría de Bochum, en el centro-oeste de Alemania, para cumplir con esa obligación.

Hasta ahora no había podido ser repatriado a su país porque la Justicia entendía que allí corría riesgo de ser víctima de tortura. Recientemente, la Oficina Federal de Migración y Refugiados del país (BAMF) había revocado ese impedimento.

El ex guardaespaldas vivía en Bochum junto a su mujer y sus hijos de las ayudas sociales. Según información facilitada por el Ministerio del Interior en abril, ha estado cobrando mensualmente del Estado alemán 1.168 euros (unos 1.500 de dólares) en concepto de prestaciones.

El tunecino negó haberse desempeñado como predicador islamista en Alemania. La Fiscalía antiterrorista alemana cerró una investigación en su contra por falta de sospecha fundada.

Bin Laden, abatido en 2011 en Pakistán por un comando estadounidense, fue el fundador de Al Qaeda y está considerado el cerebro de los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York que causaron alrededor de 3.000 muertos.