Guadalajara, Jalisco.

La Minerva se inundó. Una ola humana llegó para interactuar en el océano de la imaginación durante el espectáculo inaugural del Festival Sucede 2017.

Alrededor de 90 mil personas presenciaron el montaje La Perla, de la compañía francesa Plasticiens Volants. La multitud se dispersó en la glorieta y calles aledañas para bucear y descubrir una historia protagonizada por globos en forma de peces, calamares, caballitos de mar, medusas y pulpos.

La música y la iluminación los adentró en la travesía de la perla, quien se escapa de su concha, en este mundo submarino.

La depredadora Murena asechó. Con su doble fila de dientes largos y puntiagudos amenazó con devorarse a los asistentes.

La peligrosa especie abría su mandíbula y atrapaba a las personas, quienes gritaban y alzaban sus brazos para simular su muerte. El clímax ocurrió cuando la peligrosa especie se enfrentó a un pulpo y fue vencida, en un mar de celulares que tomaban fotografía y video.

El espectáculo tuvo una duración de una hora. El espacio elegido para presentarlo limitó la visibilidad de la mayoría de los tapatíos, generando molestia. En las calles aledañas a La Minerva no se podía caminar. Los niños eran subidos a los hombros de sus padres para que alcanzaran a ver el espectáculo, pero los edificios impidieron que pudieran apreciar el montaje completo, con los 14 globos inflables.

Los primeros en llegar e instalarse en la Glorieta pudieron interactuar e interpretar con su imaginación La Perla.