Por: Aurora Quijas

El Centro Universitario de los Lagos a través del Centro de Atención Psicológica se realizó la novena y última sesión de la Jornada “El proceso del embarazo, parto y posparto” con el tema: “Cambiar la forma de nacer, cambia el mundo.

Los seres humanos crean conciencia transpersonal y una conciencia ordinaria, las cuales están presentes desde el momento de la concepción, lo que permite que reciba y perciba distintas señales el bebé desde el cuerpo materno, informó Norma Emilia Escalante Betancourt, Ginecóloga.

La importancia de que la madre y el recién nacido se mantengan cerca la primera hora de vida, la cual es llamada la hora dorada que ayuda a crear un vínculo sano y materno al estar piel con piel, destacó Escalante Betancourt.

“El estado de felicidad de la madre al tener a su bebé en los brazos ayuda a que se presente un sano vínculo, así como la reacciones de los bebés desde establecer su temperatura, su ritmo cardíaco, una adecuada respiración al momento de nacer”.

El bebé muestra un porcentaje de inestabilidad del 92 por ciento cuándo se deja en una incubadora desde los primeros minutos de nacimiento, esto en comparación al 17 por ciento de inestabilidad al dejarlo en el pecho de la madre. La inestabilidad se mide biológicamente por los parámetros de la izquierda: la temperatura y las detecciones de la respiración, la saturación de oxígeno son parámetros médicos.

“Para un recién nacido la separación de cuatro horas lo mete a un estrés tóxico, las investigaciones dicen no separar a la mamá del bebé por 24 horas porque puede presentar ciertos niveles de estrés”, comentó Escalante Betancourt.

La importancia de que la madre y el padre atiendan, cuiden las necesidades del bebé, ayuda en su desarrollo para crear seguridad, confianza y felicidad.

Por último, Escalante Betancourt agregó que como parte de los eventos biológicos, el cordón umbilical no debería ser cortado tan rápido esto debido a que se corta el flujo sanguíneo de golpe.