Por Gabriela León

El siniestro que comenzó desde el pasado miércoles 15 de mayo en la Sierra de Santa Inés, en Lagos de Moreno, logró controlarse luego de cuatro días de labores de sofocamiento por parte de más de 50 elementos de Protección Civil y Bomberos de este municipio y de Encarnación de Díaz; además de Protección Civil Jalisco y vecinos cercanos al terreno. La afectación asciende a los 30 kilómetros cuadrados de pérdida en vegetación de encino, huizache y hierba, además de fauna silvestre del lugar.

El director de Protección Civil Municipal, José de Jesús Álvarez Hernández, señala que dada la lejanía y el difícil acceso a la zona, no se puede comprobar si se trata de un incendio provocado, pero que las primeras sospechas se encaminan a las afectaciones de la temporada de estiaje:

“En los últimos días se han tenido temperaturas muy altas, alrededor de los 31° centígrados y ahorita con la temporada de estiaje se reseca bastante la vegetación y cualquier cosa nos puede originar una chispa. Este inicia más o menos por el kilómetro 70 - 71 de la carretera León - Aguascalientes, que fue en primera instancia uno de los lugares donde se comenzó a atacar el incendio, ahí por el paso de vehículos, dentro de las recomendaciones de prevención, le pedimos a los automovilistas no fumar en estos lugares con vegetación seca, o incluso de algún vehículo que se hubiera estacionado en la autopista con el auto encendido pudiera haber originado que la misma temperatura y el escape del vehículo hubiera podido originar el incendio”.

Debido a las condiciones geográficas de la zona, el siniestro tuvo afectaciones tanto subterráneas – que provocan daño a las raíces y la erosión del suelo –, así como superficiales o de copa – que son las afecciones a las copas de árboles o vegetación muerta y basura.

El director de Protección Civil Municipal afirma que esto provocó que las labores para controlarlo pararan por la noche y evitar accidentes o lesiones a los rescatistas y voluntarios, ya que las condiciones climáticas hacían más difícil la sofocación.

“Lo complicado en su control fue por las fuertes rachas de viento y lo accidentado del terreno, por las barrancas y los cerros de la zona, esto fue lo que nos complicó para poder tener un mejor o más rápido control del incendio. Aquí básicamente nosotros llegamos en la unidades y los dejamos en un lugar estratégico y teníamos que llegar a pie con nuestras herramientas a los lugares donde iba la orilla del incendio”.

Otro incendio semejante ocurrió en la localidad conocida como El Tigre, sobre carretera Lagos - León, donde se registra una zona importante de ganadería y pastoreo. Éste dañó cuatro kilómetros cuadrados de tierra.

“Hay algunas zonas en la mancha urbana que tenemos como lotes baldíos y también algunas zonas que tenemos pegadas al río, que hay muchos carrizos, entonces hemos tenido muchos incendios en esos lugares también. Como Unidad de Protección Civil tenemos contabilizados 27 siniestros, pero todavía continúa la temporada de calor, de estiaje, entonces todavía falta camino, y algunas semanas hasta que lleguen las primeras lluvias y ya se empiece a mojar un poquito el suelo para que nos ayude a controlar este tipo de siniestros”, añade Álvarez Hernández.