Buscarán prohibir uso de bocinas en callejón por recomendación de DDHH
Fotografía: Antonio Díaz




Autlán de Navarro, Jalisco.

Esta mañana músicos de Autlán y la región se manifestaron en la presidencia municipal de Autlán para mostrar su inconformidad por las medidas emitidas contra la contaminación auditiva que se tomarán para este carnaval 2020, las cuales prohíben el ingreso de bocinas al callejón de la alegría.

Los manifestantes explicaron que sin las bocinas es imposible desempeñar sus actividades, especialmente para los vocalistas, grupos norteños y serreños que dependen del amplificador para ejecutar sus instrumentos.

Ante las protestas, el secretario general del Ayuntamiento, Gilberto García Vergara, explicó que las medidas no son decisión del patronato ni del ayuntamiento si no que estas obedecen a denuncias emitidas por vecinos de la zona y a recomendaciones emitidas por Derechos Humanos (DDHH) respecto a los decibeles permitidos en zonas residenciales (45 en la noche). Dijo que de no cumplirse con estas recomendaciones habría sanciones contra los funcionarios.

“Cada año se quejan los vecinos del ruido que se genera en el callejón, la diferencia con otros años es que en Jalisco se aprobó una reforma que regula los decibeles generados y que nos va generar multas de cantidades muy fuertes. No es un tema de ayuntamiento ni de un servidor, es un asunto de Derechos Humanos. Incluso la recomendación es mover de lugar el callejón fuera del área urbana, el acuerdo que se logró para que el callejón quede ahí, donde la gente lo quiere, es que no haya ruido excesivo con el tema de bocinas”.

Los músicos solicitaron el uso de bocinas para los vocalistas y guitarristas de las agrupaciones, argumentaron que con bocina o sin bocina, los decibeles permitidos se rebasarían por los instrumentos propios de las agrupaciones (percusiones y alientos metal) y que prohibir su uso no contribuye a resolver el problema de contaminación auditiva. Solicitaron al ayuntamiento fungir como intermediario para llegar a un acuerdo con los vecinos, a lo que García Vergara respondió:

“Ustedes vayan con los vecinos, vayan con Derechos y Humanos y ustedes arreglen su problema y nosotros con mucho gusto vamos a acceder”.

Fue el síndico municipal, Guilermo Espinoza Solórzano, quien se comprometió a buscar el dialogo entre las partes.

Lo que puedo hacer es tratar de localizar a representantes de los vecinos a un representante de derechos humanos y reunirnos el viernes, el acuerdo es entre ustedes yo solo haré acto de presencia para mediar, pero no intervengo en las decisiones que ellos tomen, si deciden que no, les pido por favor respeten la decisión".

La norma señala que el ruido máximo para las zonas residenciales es de 55 decibeles en horario de 6:00 a 22:00 horas; y de  45 de 22:00 a 06:00 horas. Esta normativa protege a la comunidad que se ve afectada por problemas de contaminación acústica, desde el punto de vista de la salud pública.


Antonio Díaz