París, Francia.

El patrón del París SG, Nasser Al-Khelaifi, imputado por la justicia francesa por corrupción en el marco de la candidatura de Doha a organizar el Mundial de Atletismo, guardó silencio ante los jueces parisinos el pasado 11 de junio en un interrogatorio al que la AFP tuvo acceso este lunes.

"Hago uso de mi derecho a no declarar", respondió Al-Khelaifi a cada una de las 28 preguntas de los magistrados.

"Todas las respuestas útiles ya habían sido aportadas" en dos notas dirigidas a los magistrados a finales de mayo "y no había ningún elemento nuevo en la investigación desde el último interrogatorio", justificó a la AFP los abogados del dirigente catarí, Francis Szpiner y Renaud Semerdjian.

En marzo, la justicia francesa interrogó a Al-Khelaifi por el pago sospechoso a finales de 2011, en plena campaña de Doha para obtener el Mundial de Atletismo de 2017, atribuido finalmente a Londres, aunque la capital catarí fue elegida como sede para 2019, un campeonato que se celebró en el Khalifa International Stadium del 27 de septiembre al 6 de octubre.

Unos días antes de la votación, la sociedad Oryx Qatar Sports Investment, propiedad de Al-Khelaifi y de su hermano Khalid, pagó un total de 3.5 millones de dólares a una empresa de mercadotecnia deportiva dirigida por Papa Massata Diack, hijo del antiguo presidente de la Federación Internacional de Atletismo (IAAF), Lamine Diack.

Los jueces de instrucción buscan determinar si en contrapartida de estos pagos, Lamine Diack, presidente de la IAAF entre 1999 y 2015, trabajó para posponer las fechas de organización de estos dos acontecimientos, debido a las condiciones meteorológicas del país.

En su declaración de marzo, Al-Khelaifi explicó que no estaba al corriente de los pagos de Oryx QSI y negó su implicación en la organización de los Mundiales de atletismo.